Síguenos

Firmas

’25 de marzo y entonces sucedió…’, por José Luis Fortea

Publicado

en

forteaJosé Luis Fortea

 

 

 

 

 

25 de marzo………………… y entonces sucedió que………………………..

…… en 1199, a sus cuarenta y un años, el rey Ricardo I de Inglaterra, conocido como “Corazón de León”, cuando se encontraba en Limoges, conteniendo la revuelta protagonizada por Felipe de Cognac, vizconde Aimar V, hijo ilegítimo del propio rey en el castillo de Châlus-Chabrol, que protegía el acceso a la citada localidad por el sur, mientras paseaba sin su cota de malla (nombre este dado a la protección que utilizaban los hombres de armas por aquellos días, a modo de camisa compuesta de aros metálicos unidos entre sí, que por su flexibilidad y ligereza de peso proporcionaba una buena y eficaz defensa corporal) por los alrededores del mencionado castillo, resultó herido por una flecha en su hombro izquierdo, lanzada por alguien desde una ballesta.

Anochecía en el castillo, Ricardo I había salido a inspeccionar las obras de la reconstrucción del sitio por el que acaba de combatir, cerca de sus  murallas, viendo en una de las almenas, un único defensor que porta una ridícula defensa en sus manos, a modo de escudo protector, una “sartén”. El rey admira la confianza de este, llevando dicho artilugio, acercándose y en lo que parece un juego, mientras le aplaude, este le lanza una de sus flechas desde su ballesta, impactando en su cuello, felicitando el monarca a aquel de sus defensores por su ahora doble osadía, restándole importancia a la herida producida.

Según relata el cronista inglés, Roger de Hoveden, unido a Ricardo I en la tercera cruzada, la de Marsella, desde hacía ya nueve años, desde agosto de 1190, de quien fue realizando escritos y anotaciones, encontrándose presente en aquellos momentos, cuenta que el rey en el interior de su tienda intentó extraerla, en un esfuerzo vano e infructuoso, quebrándose la madera y quedándose el hierro bien adentro, teniendo que ser llamado un cirujano, al que Hoveden acabaría por describir como “un carnicero”, quien no sin ciertas complicaciones, al encontrarse próxima a las vértebras del cuello, lograría asiéndose del dardo astillado, por fin sacarlo.

De quién era y por qué le arrojó la mencionada flecha desde su arma, en otra reseña la desarrollaremos.

La herida acabaría infectándose y por gangrenar la zona, falleciendo como consecuencia de esta, doce días después, el 6 de abril de 1199.

………………………………………………………………………………….

….en 1957,  en el Palacio de los Conservadores del Capitolio de Roma, seis países, Alemania, Bélgica, Francia, Italia, Luxemburgo y los Países Bajos, firmaban un doble tratado.

En virtud del primero de estos, establecería el nacimiento de la denominada Comunidad Económica Europea (CEE), el primer paso de la actual Unión Europea (UE), eliminando las barreras aduaneras entre los mismos.

Mediante el segundo de estos pactos, veía la luz la comunidad económica de la energía atómica (el EURATOM) cuya finalidad principal era coordinar, entre los miembros firmantes, los programas de investigación de la citada fuente energética.

………………………………………………………………………

………en 2014, el 25 de marzo, en el hospital Emergency de Kabul, en Afganistán, después de varios días en estado de coma, un niño de dos años, Abuzar Ahmad, daba sus primeros síntomas de recuperación y salía de este, para sorpresa de todo el personal del mencionado centro hospitalario y por extensión, de todos los que tenían conocimiento del mismo, declarando los médicos que le atienden, encontrarse, dentro de la gravedad que conlleva, estable y fuera de peligro.

El niño había ingresado con cuatro disparos en su cuerpo, uno en la cabeza, otro en su hombro y dos más en una de sus piernas, en estado comatoso, con pocas esperanzas de vida, por lo que ese 25 de marzo de hace hoy, por tanto ya tres años, se le conoce también como el “niño milagro”.

El día 20 de marzo de 2014, el periodista afgano, Sadar Ahmad, de cuarenta años de edad, quiso celebrar la entrada de la primavera (su particular Nochevieja), junto a su mujer Homaira, y sus tres hijos, Nilofar de seis años, Omar de cinco y Abuzar de dos, en el elegante Hotel Serena de Kabul.

Esa noche, cuatro talibanes, entraron en el recinto donde las familias celebraban esta vigilia del año nuevo afgano, disparando a los allí presentes, indiscriminadamente, a corta distancia, matando a todos los miembros de su familia.

El niño abandonará el hospital el día 15 de abril, gestionándose durante su estancia en el mismo la adopción de este por parte de un primo suyo, Turaj, de 25 años cuya mujer se encuentra embarazada de gemelos y que convertirá al pequeño niño Abuzar, en hermano mayor, permitiéndose, no sin laboriosas negociaciones, que dicha familia pueda reanudar una nueva vida lejos de aquel lugar, en Canadá, lugar en el que desde entonces viven.

……………………………………………………………………………………..

Advertisement
Click para comentar

Tienes que estar registrado para comentar Acceder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Firmas

Cuidar de una madre con Alzheimer: Un viaje de amor y dolor

Publicado

en

Cuidar madre Alzheimer
Cuidar de una madre con Alzheimer: Un viaje de amor y dolor-FREEPIK

En el torbellino de nuestras vidas, donde cada día parece traer consigo nuevos desafíos y responsabilidades, a menudo nos encontramos luchando por equilibrar nuestras vidas personales y profesionales. Pero ¿qué sucede cuando ese equilibrio se ve eclipsado por una realidad implacable? ¿Cómo lidiamos con el impacto emocional y psicológico de ser cuidadores de un ser querido con una enfermedad tan devastadora como el Alzheimer?

Esta es la historia de una periodista apasionada que, entre entrevistas y artículos, se enfrenta a una batalla mucho más íntima: la lucha diaria de cuidar a su madre, quien lenta pero inexorablemente se desvanece en las garras de la enfermedad de Alzheimer.

Para ella, cada día es un viaje emocional plagado de altibajos. Desde los momentos de lucidez y conexión con su madre hasta las dolorosas luchas para recordar quién es ella misma, cada momento está marcado por una mezcla de amor incondicional y dolor impotente. Es una montaña rusa de emociones, donde la alegría y la tristeza se entrelazan en un baile constante.

Su vida como periodista le ha enseñado a mirar más allá de las apariencias y a buscar la verdad en cada historia. Y en este viaje junto a su madre, encuentra una verdad más profunda: la importancia de la empatía, la compasión y el amor incondicional. A medida que navega por los desafíos diarios del cuidado, descubre una fuerza interior que nunca supo que poseía.

Pero no todo son lecciones y momentos de claridad. Hay días oscuros, días en los que el peso del cuidado parece demasiado grande para soportarlo. Días en los que la frustración y la impotencia amenazan con abrumarla. Sin embargo, incluso en esos momentos más oscuros, encuentra consuelo en la gente que la rodea. Amigos y familiares se unen para ofrecer apoyo y comprensión, recordándole a ella y a su hermana que no están solas en este viaje.

A medida que el Alzheimer avanza implacablemente, ella se enfrenta a una dolorosa verdad: la inevitabilidad de la pérdida. Pero también encuentra consuelo en el conocimiento de que el amor trasciende las barreras del tiempo y la memoria. Aunque su madre pueda olvidar su nombre y sus rostros, el amor que sienten el uno por el otro perdura, inquebrantable e indestructible.

La historia de esta periodista es una historia de amor. Un amor que desafía las limitaciones del tiempo y el espacio, un amor que persiste a pesar de las pruebas y tribulaciones. Es un recordatorio de que, incluso en los momentos más oscuros, el amor es la fuerza que nos sostiene, la luz que guía nuestro camino. El amor que vio crecer en su casa día a día, sin interrupción.

En medio del día a día, es fácil perder de vista lo que realmente importa. Pero esta historia nos recuerda que, en lo que de verdad importa, son las conexiones humanas y los lazos de amor los que nos sostienen en los momentos más difíciles. Y en el poder cuidar de su madre con Alzheimer, encuentra no solo una prueba de su amor, sino también una lección de humanidad y compasión que nunca olvidará.

SRA

Continuar leyendo