Desde la Agrupación de Fallas del Marítimo, queremos manifestar nuestra total repulsa e indignación ante los hechos acaecidos durante la celebración la noche del sábado 24 de junio, en la verbena que celebraba, con todos los permisos y documentación correspondiente en regla, la Falla L’Alguer – Ingeniero Rafael Janini, del Sector Algirós, y perteneciente a esta Agrupación, puesto que, al parecer, alguien lanzó, en plena celebración de la citada verbena, algún tipo de producto, parece ser amoníaco, el cual impactó principalmente en una mujer y un niño, siendo la peor parada la mujer, a la cual le cayó en la cara y en los ojos, siendo trasladada de inmediato por los miembros de la Comisión al Centro de Urgencias más cercano, donde al ver la gravedad, fue
remitida al Hospital Clínico.

Todo ello, lógicamente, fue puesto de inmediato por la Comisión, en conocimiento de la Policía Nacional que allí se personó y pasaron parte también a la Policía Local. Evidentemente, estos hechos van a ser denunciados tanto por los afectados, como por la propia Falla L’Alguer, que también lo indicará a la Delegación de Incidencias de Junta Central Fallera.

Las Comisiones de Falla hacemos todo lo que se nos pide para hacer los actos y cumplir con todos los requisitos correspondientes, en virtud de la vigente Ordenanza de Ocupación del Dominio Público Municipal, y queremos la concienciación con el vecindario, pero hechos lamentables como el ocurrido anoche por esta Comisión, indican que, no todos, quieren lo mismo con las Fallas, Fiesta, como todos sabemos, reconocida como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO
a finales del pasado año.

Desde la Agrupación de Fallas del Marítimo, queremos asimismo trasladar nuestro total apoyo y solidaridad, tanto a las personas que sufrieron tan lamentable y denunciable acto, como a la Comisión de la Falla L’Alguer-Ingeniero Rafael Janini, deseando una pronta recuperación a las personas que resultaron heridas, reiterando, una vez más, nuestro compromiso con el respeto y la tolerancia, que deben ser entendidos como un elemento enriquecedor de la propia sociedad.