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Alquiler vacacional: Los fraudes y estafas más comunes

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alquiler vacacional: fraudes y estafas
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Alquiler vacacional, tan de moda y con tantos riesgos de estafa al mismo tiempo. Llega el momento de decidir destino y son muchos los que eligen internet para contratar una casa o apartamento.

Pero las ventajas que suele ofrecer la web (mejores precios, opción de compartir la vivienda con familiares, amigos…) a veces van de la mano de algunos problemas que incluso, pueden derivar en estafas.

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) advierte que, desde que se ha generalizado el uso de plataformas de alquiler de viviendas para las vacaciones, las reclamaciones y demandas están siendo cada vez más frecuentes y se descubren nuevas fórmulas que los defraudadores utilizan para engañar a los usuarios. De esta manera, las estafas son cada vez más difíciles de detectar.

Alquiler vacacional: fraudes y estafas

• El pago por adelantado: Ofrecer algún beneficio a la víctima a cambio de que transfiera el dinero al margen de la plataforma donde se anuncia la vivienda, es muy común en este tipo de estafas.

Phishing (suplantación de identidad): el estafador envía un correo electrónico o enlace que, a primera vista, parece de la plataforma o de otro sitio de confianza. Estos mensajes tienen como objetivo engañar a la víctima mediante la petición de información confidencial, como contraseñas u otras direcciones de correo electrónico. De esta forma, introducen un malware, software malicioso que accede al equipo para hacerse con información confidencial.

• Demasiado bueno para ser verdad: el estafador pide a la víctima que haga una transferencia bancaria o que efectúe un pago por adelantado para poder asegurarse la reserva de una vivienda que resulta muy atractiva por ser de gran calidad a un bajo precio. El estafador se queda con el dinero sin haber proporcionado el alojamiento prometido y desaparece sin dejar rastro.

10 consejos de la OCU:

– Comparar los precios y condiciones de distintas páginas web. Los precios más bajos suelen ir ligados a una menor flexibilidad y a condiciones más reducidas.

– Leer siempre las condiciones y recomendaciones de las plataformas de alquiler de alojamiento vacacional.

– Comunicarse siempre a través de la plataforma y no transferir nunca dinero desde fuera de la página o de la aplicación. OCU recuerda que, si el consumidor decide obviar al intermediario y contratar directamente con el propietario, el usuario perderá la garantía y la plataforma no se hará cargo de la reclamación en caso de que exista algún problema.

– Desconfiar de alquileres con precios por debajo del mercado y de aquellos anuncios que ofrezcan casas espectaculares a precios demasiado bajos.

– Comprobar la veracidad del anuncio a través de otras fuentes: comentarios de otros usuarios, comprobación del lugar en Google Maps o aplicaciones similares, llamadas y preguntas al propietario por servicios concretos en la zona (restaurantes, actividades varias…). Si la información que dan es vaga, desconfiar.

– Realizar el pago por un medio seguro que proponga la plataforma y que permita dejar un rastro del pago. Tarjeta, Paypal o transferencia bancaria. En este último caso, debemos comprobar que el titular de la cuenta es el mismo que el de la vivienda que se alquila.

– Si se decide alquilar directamente con una persona física, antes de firmar el contrato o hacer la reserva se debe contactar previamente con el anunciante (a ser posible por teléfono) para confirmar su identidad y aclarar todo aquello que genere dudas.

– No pagar todo el importe por adelantado, sino intentar que sea la menor cantidad exigida y el resto a la llegada, cuando se haya comprobado que todo es tal y como se indicó en el anuncio.

– Conservar una copia de la reserva o señal. Y en caso de que se solicite una fianza, detallar claramente el concepto, las condiciones de su aplicación y que se prevea su devolución. Lo ideal es que se incluya un inventario y el estado en el que se encuentra, que debe ser comprobado antes de firmar el contrato.

– En caso de estafa, denunciar a la plataforma para que retire el anuncio y a la Policía o al Grupo de delitos telemáticos de la Guardia Civil.

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¿Cuántas torrijas se van a comer en España esta Semana Santa?

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Hacer torrijas esta Semana Santa sale un 19,3% más caro

Es tiempo de torrijas, el dulce estrella de Semana Santa. Un postre que ya no tiene tiempo límite, porque cada vez es más consumido durante todo el año. Tanto que desde hace unos años, muchas ciudades y municipios tienen «concurso de torrijas» y las mejores se suelen convertir en las mas demandadas. Su origen, según los expertos, se debe al aprovechamiento del pan sobrante en Semana Santa, una época en la que no se puede comer carne.

Está la versión clásica, elaborada con pan e infusionada en leche, canela, limón, naranja y azúcar. El truco esta en dejarla empapar bien para que quede jugosa. Pero también están las mas innovadoras: caramelizadas, con crema catalana, infusionada con té, terminadas con crema de vainilla… Y un sinfín de sabores distintos. En total,, se espera que los españoles nos lleguemos a comer hasta 10 millones de torrijas.

Las pastelerías llegan a vender más de 5.000 torrijas al día. Aunque su nombre más común es torrija, en alguna comunidades la llaman torradas de parida o sopes de Menorca. En Europa y América latina han versionado este postre típico español. En Portugal llamadas «rabanadas» y en Francia llamadas «pain perdú» o en México torrejas.

Pero muchos siguen siendo fiel a la tradición, se resisten a comprarlas, porque más importante que comerlas… Es disfrutar del momento previo y hacerlas para los más fieles a la repostería casera. Normalmente la receta de la abuela es la que triunfa, y pasa de generación en generación.

Pero con la inflación, hacer torrijas esta Semana Santa es un 31,8% más caro que en 2023, fundamentalmente por el fuerte incremento del aceite de oliva, según los datos de Asufin.

En concreto, los datos muestran que el medio litro de aceite de oliva ha pasado de costar 2,95 euros a 4,94 euros, mientras que el resto de ingredientes ha subido en menos proporción, sumando un coste total de 8,76 euros frente a 6,65 euros.

Así, el coste de la barra de pan de torrijas ha pasado de 1,19 euros a los 1,23 euros y el litro de leche es lo que menos se ha encarecido, pasando de 0,90 euros a 0,91 euros.

De esta forma, elaborar seis torrijas en 2023 costaba 6,65 euros, subiendo este año un 31,8%, hasta los 8,76 euros que cuesta elaborarlas esta Semana Santa.

Pero no es el único dulce de esta festividad, las rosquillas, no tan conocidas, también endulzan la Semana Santa, y la tradición llegada desde Cataluña de las monas de pascua.

 

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