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Ser profeta en tu tierra, por @aguedabayarri

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Águeda Bayarri

La Fundación del Valencia cf ha homenajeado estos días a Pep Claramunt, exfutbolista del Valencia cf, Campeón de la Liga de la temporada 70-71, Internacional por España y primer capitán valenciano de la selección absoluta de fútbol. Ya recibió un homenaje en Mestalla y otro, que duró varios días, en Puçol, su pueblo. Se publicó un libro con su biografía y el campo de fútbol municipal lleva su nombre. Y han pasado los años y Pep Claramunt, o José, como le llama la familia sigue siendo “profeta en su tierra “. Nadie en Puçol ha querido perderse la exposición fotográfica que estará hasta el próximo viernes en l’Espai Social la Barraca ni nadie quiso faltar a la inauguración. No me sorprendió, pero me alegró ver a gente de muchas generaciones. Contemporáneas a él, más jóvenes que sabemos de él por nuestros padres y más jóvenes todavía que saben de su historia por sus abuelos y que conocen a Claramunt de verle por el campo de fútbol, por el pueblo. 

Me gustó que el Valencia se acordara de Claramunt dentro del ciclo de exposiciones » Els nostres idols «y que los puçolencs pudiéramos disfrutar de este homenaje y ofrecerle nuestra admiración y cariño. VCF radio hizo un programa muy emotivo con muchos protagonistas que han compartido vida personal y profesional con Claramunt. Enric Esteve, el Alcalde, explicó como de orgullosos nos sentíamos y nos sentimos los puçolencs de “su” futbolista.  Viendo la exposición fotográfica me acordé mucho de Paco Ramón, Paco Panolla, es maravilloso el archivo fotográfico local que existe de la época gracias a él. La Penya Passió Valencianista de Puçol, ha trabajado muchísimo para que no faltara ningún detalle y los chicos y chicas de ADIS, Associació d’Ajuda als Discapacitats de Puçol, disfrutaron del acto como lo hicieron después con la visita a Mestalla y al entrenamiento del Valencia cf en la ciudad deportiva. Les conozco a casi todos y con esta visita, han vivido uno de sus sueños. Los futbolistas tienen la capacidad de con poco, hacer felices a muchas personas y convertir sueños en realidad.

Y ahora que la temporada de fútbol ha acabado y que ha sido tan mala para el Valencia cf, a lo mejor es el momento de replantearse que lo que hace falta es sentir para ganar. Sentir a la afición, sentir el peso del Escudo, sentir la gente que sufre y vibra por su equipo de fútbol, sentir los casi 100 años de historia, sentir que algunos futbolistas no se fueron del club por ganar más dinero, sentir que antes alguien sintió esa camiseta y que alguien portó ese dorsal. Sentir que la camiseta se suda y se disfruta. Y sentir que si se siente, las alegrías compensan los malos momentos. Sentir que se quiere y que si se quiere, se puede.

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Cuidar de una madre con Alzheimer: Un viaje de amor y dolor

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Cuidar madre Alzheimer
Cuidar de una madre con Alzheimer: Un viaje de amor y dolor-FREEPIK

En el torbellino de nuestras vidas, donde cada día parece traer consigo nuevos desafíos y responsabilidades, a menudo nos encontramos luchando por equilibrar nuestras vidas personales y profesionales. Pero ¿qué sucede cuando ese equilibrio se ve eclipsado por una realidad implacable? ¿Cómo lidiamos con el impacto emocional y psicológico de ser cuidadores de un ser querido con una enfermedad tan devastadora como el Alzheimer?

Esta es la historia de una periodista apasionada que, entre entrevistas y artículos, se enfrenta a una batalla mucho más íntima: la lucha diaria de cuidar a su madre, quien lenta pero inexorablemente se desvanece en las garras de la enfermedad de Alzheimer.

Para ella, cada día es un viaje emocional plagado de altibajos. Desde los momentos de lucidez y conexión con su madre hasta las dolorosas luchas para recordar quién es ella misma, cada momento está marcado por una mezcla de amor incondicional y dolor impotente. Es una montaña rusa de emociones, donde la alegría y la tristeza se entrelazan en un baile constante.

Su vida como periodista le ha enseñado a mirar más allá de las apariencias y a buscar la verdad en cada historia. Y en este viaje junto a su madre, encuentra una verdad más profunda: la importancia de la empatía, la compasión y el amor incondicional. A medida que navega por los desafíos diarios del cuidado, descubre una fuerza interior que nunca supo que poseía.

Pero no todo son lecciones y momentos de claridad. Hay días oscuros, días en los que el peso del cuidado parece demasiado grande para soportarlo. Días en los que la frustración y la impotencia amenazan con abrumarla. Sin embargo, incluso en esos momentos más oscuros, encuentra consuelo en la gente que la rodea. Amigos y familiares se unen para ofrecer apoyo y comprensión, recordándole a ella y a su hermana que no están solas en este viaje.

A medida que el Alzheimer avanza implacablemente, ella se enfrenta a una dolorosa verdad: la inevitabilidad de la pérdida. Pero también encuentra consuelo en el conocimiento de que el amor trasciende las barreras del tiempo y la memoria. Aunque su madre pueda olvidar su nombre y sus rostros, el amor que sienten el uno por el otro perdura, inquebrantable e indestructible.

La historia de esta periodista es una historia de amor. Un amor que desafía las limitaciones del tiempo y el espacio, un amor que persiste a pesar de las pruebas y tribulaciones. Es un recordatorio de que, incluso en los momentos más oscuros, el amor es la fuerza que nos sostiene, la luz que guía nuestro camino. El amor que vio crecer en su casa día a día, sin interrupción.

En medio del día a día, es fácil perder de vista lo que realmente importa. Pero esta historia nos recuerda que, en lo que de verdad importa, son las conexiones humanas y los lazos de amor los que nos sostienen en los momentos más difíciles. Y en el poder cuidar de su madre con Alzheimer, encuentra no solo una prueba de su amor, sino también una lección de humanidad y compasión que nunca olvidará.

SRA

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