VALÈNCIA, 23 Feb. (REDACCIÓN)

Un año más la falla Barraca-Columbretes ha hecho entrega de uno de los reconocimientos más prestigiosos del mundo fallero, los premios Barcas d’Or, que, desde hace 35 años, reconocen la pasión, implicación y trabajo de los hombres y mujeres que viven y se dedican a las Fallas.

Este año la veterana comisión ha querido distinguir la labor y dedicación de dos personalidades ilustres, el que fuera Vicepresidente de la Junta Central Fallera, José Boix Segarra, y la que, a día de hoy, es la única mujer que ostenta el honor de haber sido Fallera Mayor Infantil y Fallera Mayor de la ciudad de Valencia, en 1982 y 1992 respectivamente, Mónica Palmer Cuenca.

El Ateneo Marítimo de Valencia se vestía de gala un año más para acoger la entrega de estos galardones, que de nuevo conducía una veterana Loles Prats, hija del fundador de estos premios en 1984, Alfredo Prats, y ante diversas autoridades y personalidades del mundo fallero, entre los que se encontraban la Fallera Mayor de Valencia Rocío Gil Uncío, la primera Teniente de Alcalde Sandra Gómez y el concejal del partido popular Felix Crespo, entre otros invitados.

El evento tan emotivo como siempre, en el que, como ya es habitual, se guarda con recelo y secretismo la identidad de los premiados hasta el último momento, Mónica Palmer ha tenido unas palabras de recuerdo hacía “los que ya no están” y ha agradecido “el gran trabajo, y esfuerzo de la falla Barraca-Columbretes por mantener vivas las fallas y este entrañable acto”.

Mónica Palmer ha asegurado que “recibe este premio con gran emoción y respeto, sabiendo del gran trabajo y plenitud con la que vivieron y viven las fallas aquellos que lo recibieron antes” y ha querido agradecer a su familia el haberle transmitido su gran amor por las fallas.

Palmer ha destacado que «nunca me pierdo este acto en el que coincido con otras máximas representantes de la fiesta como son Amparo Marín (FMV 1981) y Begoña de la Concepción (FMV 1983)» y ha querido recordar que para ella «es un acto entrañable al que siempre intento acudir porque tengo la oportunidad de reencontrarme con personas muy queridas que conocí en mi etapa como Fallera Mayor Infantil de Valencia de 1982 y Fallera Mayor de 1992 y también los que he ido conociendo desde entonces».