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Consejos para refrescar la casa sin aire acondicionado

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refrescar la casa sin aire acondicionado

Refrescar la casa sin aire acondicionado es posible. Y es que las olas de calor que estamos sufriendo en los últimos tiempos son cada vez más fuertes. La Comunitat Valenciana es una de las regiones afectadas por este gran ascenso de las temperaturas.

Para tratar de paliar los efectos del calor, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha lanzado una serie de medidas contra las altas temperaturas tanto fuera como por dentro de casa; ofreciendo alternativas más baratas y ecológicas al aire acondicionado.

Refrescar la casa sin aire acondicionado:

  • Aprovecha la ventilación natural: cuando la temperatura exterior comience a ser uno dos grados inferior a la del aire dentro de casa, abre las ventanas. La ventilación natural es muy efectiva cuando se pueden abrir ventanas en fachadas opuestas, lo que provoca una corriente de aire por la diferencia de temperatura entre ellas. Si todas las ventanas se encuentran en la misma fachada, el efecto se reduce.

 

  • Intenta impedir en lo posible la entrada de aire caliente. La medida elemental es mantener cerradas puertas y ventanas en las horas de más calor, entre media mañana y media tarde. Para que este procedimiento sea efectivo, las ventanas deben estar protegidas por persianas o toldos. La renovación de aire se puede reducir al mínimo durante esas horas, pero es conveniente limitar las actividades que aumentan la contaminación interior: fumar, utilizar pinturas o pegamentos, o cocinar.

 

  • Te puede bastar con utilizar ventiladores: no reducen la temperatura del aire, pero lo hacen circular más rápido. Si la velocidad del aire es superior a 0,2 m/s, la evaporación del sudor se acelera, ayudando al cuerpo a refrescarse.

 

  • Trata de disminuir las fuentes de calor. Limita el uso de electrodomésticos y bombillas al que sea imprescindible. Procura no utilizar el horno, la plancha, la secadora o cualquier aparato que funcione con resistencias durante las horas de más calor. Ten en cuenta que los LED o las bombillas de bajo consumo emiten mucho menos calor que las bombillas tradicionales.

 

  • Para adaptar la casa al calor, una buena idea es quitar las alfombras, y usar en el hogar los tejidos más frescos en el hogar, como el algodón o el lino.

 

  • Aísla las habitaciones más calurosas. Las habitaciones con orientación sur u oeste suelen ser las más calurosas, y conviene aislarlas para que no se extienda el calor al resto de la casa. Por el contrario, durante la noche abre las habitaciones más fresquitas para crear corrientes y que se refresque la casa.

 

 

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Estos son los beneficios de vivir en un pueblo

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pueblo más bonito Comunitat Valenciana

Explorando los Encantos Rurales: Beneficios de Vivir en un Pueblo

En un mundo cada vez más urbanizado y conectado, la vida en un pueblo puede parecer anacrónica para muchos. Sin embargo, estos rincones de tranquilidad y comunidad ofrecen una serie de beneficios que las bulliciosas ciudades a menudo no pueden igualar. Desde la serenidad de los paisajes naturales hasta la conexión interpersonal más auténtica, aquí exploramos por qué vivir en un pueblo puede ser una elección gratificante.

1. Tranquilidad y Naturaleza

Los pueblos suelen estar rodeados de impresionantes paisajes naturales, desde colinas ondulantes hasta densos bosques y ríos serpenteantes. La tranquilidad que proporciona este entorno natural es invaluable para aquellos que buscan escapar del estrés y el ajetreo de la vida urbana. Respirar aire fresco y disfrutar de la serenidad de la naturaleza puede tener un impacto positivo en la salud mental y emocional.

2. Comunidad y Conexión Personal

En un pueblo, la comunidad es más que una palabra; es una realidad tangible. Las relaciones interpersonales son más cercanas y significativas, ya que los residentes suelen conocerse entre sí y se apoyan mutuamente en tiempos de necesidad. Los lazos comunitarios más fuertes pueden generar un sentido de pertenencia y seguridad que es difícil de encontrar en entornos urbanos más grandes y anónimos.

3. Costo de Vida y Calidad

En general, los costos de vida en los pueblos tienden a ser más bajos que en las ciudades. Los precios de la vivienda, la alimentación y otros gastos cotidianos suelen ser más asequibles, lo que puede permitir a los residentes disfrutar de una mejor calidad de vida con menos presión financiera. Además, en muchos pueblos, las distancias más cortas y la menor congestión vehicular pueden traducirse en menos tiempo perdido en desplazamientos y más tiempo para disfrutar de la vida.

4. Estilo de Vida Más Relajado

La vida en un pueblo a menudo sigue un ritmo más lento y relajado. Las prisas y el estrés asociados con la vida urbana disminuyen, lo que permite a los residentes tomarse el tiempo necesario para disfrutar de las pequeñas cosas de la vida. Desde paseos tranquilos por el campo hasta tardes tranquilas en la plaza del pueblo, la vida en un entorno rural puede ofrecer una sensación de calma y serenidad que es difícil de encontrar en la vorágine de la ciudad.

5. Valor Cultural e Histórico

Los pueblos suelen estar impregnados de historia y cultura, con edificios antiguos, tradiciones arraigadas y una rica herencia que se remonta a siglos atrás. Esta conexión con el pasado puede ofrecer una sensación de arraigo y pertenencia a los residentes, así como oportunidades para explorar y aprender sobre la historia local y las tradiciones únicas de la región.

Contrastando con la Vida Urbana

Aunque los pueblos ofrecen una serie de beneficios atractivos, es importante reconocer que no son para todos. Las ciudades tienen sus propias ventajas, como una mayor diversidad cultural, una amplia oferta de entretenimiento y oportunidades profesionales. Además, algunas personas prefieren el ritmo acelerado y la emoción constante de la vida urbana.

En última instancia, la decisión de vivir en un pueblo o una ciudad depende de las preferencias individuales y las necesidades de cada persona. Para algunos, la tranquilidad y la conexión comunitaria de un pueblo son invaluables, mientras que para otros, el bullicio y la diversidad de la ciudad son irresistibles. Lo importante es encontrar el entorno que mejor se adapte a tu estilo de vida y te haga sentir más feliz y realizado.

 

 

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