La candidata a la alcaldía de València, Pilar Lima, ha criticado que el Ayuntamiento de València haya privatizado «el espacio público en favor de una empresa privada en plenas fallas, favoreciendo a una empresa con un espacio privilegiado y privando a la ciudadanía de dicho espacio» y pide transparencia sobre la cesión por 35.000 euros a Ikea de una superficie de 30 m2 para ver las mascletàs.
Lima ha expuesto que es «una irrisoria tomadura de pelo malvender el espacio público y mercantilizarlo», pues el contrato, que incluye la ocupación del espacio público con el «Balcón Ikea», presencia de las falleras mayores y 106 espacios publicitarios en toda la ciudad, ha costado a Ikea un precio muy por debajo del precio de mercado, que ronda los 3.000 euros al día por balcón, sin publicidad ni presencia de falleras mayores.
El contrato no especifica el coste de cada uno de los servicios y Lima advierte al consistorio que «la contratación pública no es un mueble que monta por piezas la ciudadanía o la prensa sino que debe ser transparente, claro y cumpliendo la ley».
Por todo ello, Lima exige explicaciones y transparencia con lo que es de todas y todos los valencianos y asegura que «ya pasamos por la oscura etapa del PP, el gobierno de València necesita el impulso de Podem, también en transparencia».