Tras el juicio y el continuo cruce de acusaciones protagonizados en los platós de televisión entre Belén Esteban y el que fuera su representante, Toño Sanchis, por fin se ha dictado sentencia.
23 días después, la jueza ha dado la razón a la ‘Princesa del pueblo’ en la demanda que interpuso
contra su ex manager, en la que le reclamaba cerca de 500.000 euros en concepto de atrasos. Según Joaquín Prat, del Programa de Ana Rosa: “No ha sido nada favorable para Toño. A Belén le dan todo lo que pedía y más”.
Tras conocer la sentencia, por teléfono y en exclusiva para ‘El Programa de Ana Rosa’ Toño Sanchis se ha mostrado tranquilo, de camino a Valencia para leer la sentencia con mayor detalle, y ha declarado que recurrirá la sentencia, que no es “nada favorable” según sus propias palabras.
Como no podía ser de otra manera, Belén Esteban ha dicho sus primeras palabras tras conocer la feliz sentencia en su programa, en ‘Sálvame’. Visiblemente emocionada y hecha un manojo de nervios, la colaboradora ha expresado cómo se siente.
“Me he enterado esta mañana a través de un compañero, me he abrazado a Miguel y he roto a llorar”. La colaboradora ha explicado que aún no se cree haber ganado en todo: “La sentencia no podía haber sido mejor para mí”. Belén no ha querido abandonar el plató de ‘Sálvame’ sin antes agradecer a todos los que han pasado este largo y duro trance junto a ella, y de manera muy especial, a su madre.
Tal y como han detallado en ‘El Programa de Ana Rosa’, el escrito, de nueve páginas, determina que «hay que darle 380.000 euros, que es la cantidad que solicita el informe pericial de parte que presentó y al que le han dado una credibilidad absoluta». A esa cantidad hay que «sumarle los intereses, que no se especifican, pero ella en la demanda indicaba que ascendían aproximadamente a 77.000 euros».
Belén Esteban ha ganado, por el momento, la batalla judicial al que fuese su representante durante varios años y con el que mantuvo una importante relación de amistad hasta que la de Paracuellos se percató que no le cuadraban las cuentas.