El Roig Arena de València fue testigo del emocionante discurso de despedida de las Falleras Mayores de València 2025, quienes, ante miles de asistentes, agradecieron al mundo fallero, a sus familias y a todas las instituciones que han hecho posible un año inolvidable.
Las protagonistas destacaron que su primera palabra de agradecimiento debía ser para València, “terra de llum banyada pel Mediterrani, de foc i de flama purificadora”, y al mundo fallero que, según afirmaron, “és un tresor, el motor vertader d’esta festa, la llum que mai s’apaga”.
Agradecimientos a comisiones, familias y Junta Central Fallera
Las Falleras Mayores pusieron en valor el papel de cada comisión que les abrió sus puertas, y subrayaron la importancia de la Junta Central Fallera y de todos los voluntarios que hacen posible cada acto, campeonato y celebración.
También dedicaron palabras muy sentidas a sus sectores y comisiones de origen: Ripalda, Beneficència i Sant Ramon y Arxiduc Carles-Xiva, a quienes consideraron su “refugi i família”.
El discurso se llenó de menciones a sus compañeras de viaje, a sus Cortes de Honor, a quienes definieron como su apoyo y su alegría: “Sou l’abraçada que no cal demanar, la rialla que apareix en el moment precís, el meu equilibri i el meu suport”.
El recuerdo más íntimo: las palabras de Berta Peiró a su padre
El Roig Arena vivió un instante de especial emoción cuando Berta Peiró, Fallera Mayor de València 2025, tomó aire para dedicar unas sentidas palabras a su padre. No habló de protocolo ni de cargos, sino de lo más profundo: el vínculo familiar que ha marcado su vida. Con la voz entrecortada, recordó su presencia constante, incluso en los momentos más difíciles, y la huella que siempre la ha acompañado en su camino fallero.
«Pare, hui estàs present en cada aplaudiment, en cada somriure i en cada pas que he donat com a Fallera Major de València. Esta flama que hui deixe no s’apaga mai, perquè també és la teua», dijo mirando al cielo.
El público, en silencio absoluto, rompió en una de las ovaciones más largas y sentidas de la gala, consciente de que aquel instante trascendía el escenario para convertirse en un homenaje íntimo y eterno. Fue, sin duda, el momento más humano de la noche, el que recordó que detrás de cada Fallera Mayor hay una historia personal hecha de sueños, esfuerzo y, sobre todo, amor.
Hermandad entre fiestas y orgullo de representar a València
Las Falleras Mayores también recordaron los lazos creados con las fiestas de Castelló y Alacant, destacando la hermandad entre las Belleses del Foc y la Reina de las Fiestas de Castelló. “Viure altres festes ens fa estimar la gran cultura que tenim”, afirmaron.
Del mismo modo, reconocieron el valor de haber paseado el nombre de València con orgullo y responsabilidad: “Ser Fallera Major significa formar part d’una història que mai s’acaba. Encara que les falles siguen cendra, el món faller sempre deixarà encesa la flama”.
Un legado eterno: la flama que no s’apaga
El mensaje final fue una invitación a soñar juntos y a mantener viva la esencia de las Fallas:
“La flama que hem custodiat enguany no s’apaga, s’entrega, com una torxa eterna. Hui no volem dir-vos adeu, volem dir-vos gràcies. Gràcies per fer possible la millor festa del món. Gràcies per este 2025 de somni. Gràcies per ensenyar-nos que quan tot s’apaga, queda una flama que crema per sempre en el cor, i eixa flama sou tots i totes vosaltres. Per sempre… GRÀCIES VALÈNCIA”.
El público respondió con una larga ovación, reconociendo la emoción y el cariño que desprendió el discurso, que ya queda para la historia de las Fallas de València.
Puedes seguir toda la actualidad visitando Official Press o en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter o Instagram y también puedes suscribirte a nuestro canal de WhatsApp.