Madrid, 6 may (OFFICIAL PRESS/EFE).- La Guardia Civil ha desmantelado una banda que presuntamente estafó a 160 personas de toda la geografía nacional durante el Black Friday del año pasado, cuando ofrecieron en internet dispositivos electrónicos muy baratos, sobre todo consolas PlayStation, que las víctimas pagaron y nunca recibieron.
Con esas transacciones fraudulentas llegaron a obtener un beneficio de 240.000 euros, informa la Dirección General del instituto armado en un comunicado, en el que se asegura que este grupo habría estafado a usuarios de Alicante y Valencia.
En la operación denominada «Electronicplay» han sido detenidas diez personas de entre 20 y 49 años en distintos municipios de la Comunidad de Madrid, acusadas de pertenencia a grupo criminal, blanqueo de capitales, estafa y usurpación de estado civil.
Tras pasar a disposición judicial quedaron en libertad a la espera de la instrucción del caso, salvo el presunto líder de la banda, que ingresó en prisión provisional por orden del Juzgado número 2 de Villajoyosa (Alicante), encargado del caso.
El modus operandi de esta banda de estafadores consistió en crear páginas web fraudulentas en las que publicitaban dispositivos electrónicos a precio de ganga, muy inferior al habitual en el mercado legal.
Su actividad comenzó a finales de noviembre de 2021, aprovechando el periodo de ofertas del Black Friday.
Las víctimas, que pagaron a través de transferencia bancaria o Bizum, creían que se encontraban ante una venta lícita, tanto por la apariencia de la web y de los anuncios publicitarios usados como reclamo, como por la existencia de teléfonos móviles de atención al cliente.
Sin embargo, nunca recibieron los productos adquiridos ni obtuvieron respuesta de los supuestos vendedores, por lo que fueron denunciando la estafa a la Guardia Civil.
Los investigadores han constatado que la banda había contratado a «mulas» que, a cambio de comisiones y porcentajes de los beneficios de las estafas, accedían a figurar como titulares en las cuentas bancarias usadas para el fraude y que creaban monederos virtuales a través de plataformas de criptomonedas para dificultar el hallazgo del dinero.
Tras recibirse denuncias de víctimas de diferentes provincias, la Guardia Civil las relacionó por las características y el modus operandi utilizado en el fraude e identificó a los integrantes del grupo.
Finalmente, el pasado 8 de abril se desarrolló un operativo en distintos municipios de la Comunidad de Madrid que acabó con las detenciones y un registro domiciliario en la localidad de Colmenarejo, donde se intervinieron equipos informáticos, dispositivos móviles y veinte cuentas bancarias vinculadas con la banda.