La vicepresidenta del Gobierno, ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad, Carmen Calvo, ha señalado sobre las declaraciones de Quim Torra que «con frases inaceptables no se ataca al Estado, el Gobierno de España sabe en tiempo y forma cuáles son sus obligaciones constitucionales. A las derechas españolas que están en un discurso radical e incomprensible les pediríamos que hagan oposición al Gobierno pero no a España ni a sus problemas. Frente a determinadas situaciones hace falta lealtad y unidad».
La vicepresidenta ha incidido, en respuesta a cuestiones planteadas por los medios de comunicación tras su visita al Museo Íbero de Jaén, en que «al Gobierno le preocupa la inactividad en el Parlamento de Cataluña. El presidente Torra lo que hace es atacarse a sí mismo, cuando tiene un parlamento que está inactivo: es lo que me preocupa y lo que nos debería preocupar a todos, que cumpla con su calendario y sus funciones, porque ésa es la legalidad constitucional y estatutaria. Frente a esas actitudes inaceptables el Gobierno sabe cuándo y cómo tiene que reaccionar. Ya hemos demostrado cuál es nuestra concepción de nuestro país y cerramos filas en torno a la democracia y la Constitución. No se puede entender la falta de lealtad y de altura de miras para hacer política con los problemas de nuestro país».
Carmen Calvo ha añadido que «el Gobierno de España habla por obligación y por convicción con todos los gobiernos autonómicos. Con el Gobierno de Cataluña hemos recuperado la normalidad que se había perdido: Hacía falta dialogo, capacidad para encontrar salidas y soluciones cumpliendo la Constitución y las normas. Hemos activado comisiones bilaterales que se reflejan en el estatuto de Autonomía de Cataluña para hablar de sus problemas, de sus infraestructuras, de la calidad de sus servicios públicos y de los derechos de los catalanes, porque este Gobierno se siente responsable de todos los catalanes, de todos y cada uno de sus hombres y mujeres, voten lo que voten».
Por último, sobre la controversia que el PP ha intentado generar cuestionando la legalidad del desarrollo del Pacto de estado contra la Violencia de Género, la ministra Carmen Calvo ha pedido a Pablo Casado «que no rompa la unidad en la lucha contra la violencia machista, que siendo un líder nuevo, un hombre joven y que seguro que se ha leído de principio a fin y conoce el Pacto de Estado contra la Violencia de Género, tiene que entender que el decreto hace un desarrollo jurídicamente impecable del Pacto que su partido votó a favor, y que en la lucha contra la violencia machista no caben atajos para hacer política. Será decepcionante si es el señor Casado decide caminar por esa vía radical y extrema. Sería conveniente que no le hicieran oposición a su país con algunos temas, ni con una tragedia enorme como la violencia machista y los asesinatos de las mujeres.»
«El pacto de Estado contra la Violencia de Género estaba atascado y este Gobierno ha acelerado su desarrollo al máximo, porque no podemos asumir una democracia plena con la inseguridad de las mujeres, algunas de ellas asesinadas», ha concluido la vicepresidenta.
Carmen Calvo ha realizado estas declaraciones tras su visita al Museo Íbero, en la que ha estado acompañada por la consejera de Igualdad y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, el presidente de la Diputación de Jaén, Francisco Reyes, la subdelegada del Gobierno en Jaén , Catalina Madueño y la delegada de la Junta de Andalucía en Jaén, Ana Cobo, además del alcalde accidental de la ciudad, Manuel Bonilla, la directora del Museo Íbero, Concha Choclán, los comisarios de la exposición «La dama, el príncipe, el héroe y la diosa», Arturo Ruiz y Manuel Molinos y la presidenta de la Asociación de Amigos de los Íberos, Pilar Palazón.
La vicepresidenta y ministra ha querido destacar sobre el Museo Íbero que «es uno de los grandes museos de España, que cuenta con unos recursos para entender la cultura mediterránea, la andaluza y la singularidad del mundo íbero y de nuestro país. España se juega mucho en nuestro PIB con las industrias culturales y con el importante reclamo turístico que somos en el mundo: cada día tenemos más turismo cultural que además es un servicio público y un derecho de la ciudadanía; no hay más que entrar en este espacio, que es un símbolo de 40 años de la democracia española: hemos transformado una cárcel en un museo, un lugar de dolor y sufrimiento en un lugar de creatividad, libertad y de la alegría que la cultura aporta a la vida».