VALÈNCIA, 14 Ago.- Agentes de la Policía Nacional han detenido a un matrimonio de nacionalidad rumana presuntamente dedicado a la trata de seres humanos con fines de explotación sexual en Benigànim (Valencia) y han logrado liberar a una joven de la misma nacionalidad que era prostituida en una carretera del municipio y a la que obligaban a trabajar bajo un «control extremo» hasta diez horas diarias.
La víctima tenía que llamar a sus captores cada vez que realizaba un servicio para que recogieran la prestación recibida, según ha informado la Policía en un comunicado. El detenido supuestamente la golpeaba y violaba cuando deseaba y llegó a ser obligada a abortar en dos ocasiones. Al matrimonio se le imputa un delito de trata de seres humanos con fines de explotación sexual y se encuentra en ya prisión provisional.
La investigación se inició el pasado mes de febrero. Los agentes recibieron una solicitud por parte de la Fiscalía de Cooperación Internacional de la Fiscalía General del Estado, en la que se comunicaba la existencia de una orden europea en la que interesaba saber «toda la información posible» sobre el ahora detenido.
Por ello, los investigadores comenzaron las gestiones precisas y comprobaron la actividad delictiva del matrimonio. Los policías constataron que la víctima había sido captada por esta pareja en Rumanía bajo la promesa de un «trabajo digno y mejores condiciones económicas».
Sin embargo, al llegar a España, la obligaron a ejercer la prostitución «bajo amenazas y coacciones». La joven tenía un horario fijado por los detenidos y era trasladada a una carretera de la localidad donde vivían los captores y en la que permanecía desde las 10.00 hasta las 20.00 horas.
Los agentes pudieron detectar el control extremo al que era sometida ya que cada vez que realizaba un servicio debía llamar sus captores para que recogieran la remuneración que había recibido.
Cuando la víctima se negó a realizar prácticas sexuales o la veían hablando con alguna persona de su país natal, supuestamente era «golpeada, vejada y humillada» por el detenido, que la sometía a un «abuso constante sin importar su estado de salud».
ABORTOS TRAS VIOLACIONES
De hecho, según la Policía, el detenido presuntamente violó a la mujer en varias ocasiones y se quedó dos veces embarazada. El matrimonio la obligó a abortar para poder continuar lucrándose con su explotación.
La Policía Nacional ha podido comprobar que los detenidos se aprovechaban de la posición de dominio sobre la víctima, que estaba aislada y no podía sociabilizar con otras personas, de tal forma que creía que no tenía más opción que conseguir beneficios para sus captores.
La investigación finalizó con la entrada y registro en el domicilio de la pareja arrestada, donde los agentes intervinieron 320 euros en efectivo, documentación de la víctima, teléfonos móviles, justificantes de dinero enviado a Rumanía y documentos que prueban los servicios sexuales a los que era obligada a practicar la víctima.
El matrimonio captador fue arrestado y puesto a disposición de la autoridad judicial, que ha decretado su ingreso en prisión provisional.
Fuente: EUROPA PRESS