Hace ya cuatro años que salió a la luz el estudio de Instituto Ipsos que tanto dio que hablar sobre la tendencia del adulterio en España. Según los datos de la encuesta realizada a una muestra de 824 participantes de entre 18 y 65 años, un treinta y cinco por ciento de hombres y un veintiséis por ciento de mujeres reconocían haber sido infieles a su pareja.
No obstante, en Ipsia, Centro de Psicología en Madrid, reconocen que «Hay algo que no cuadra». Y es que a pesar de lo bochornosas que puedan resultar las cifras mencionadas, un ochenta y tres por ciento de la población cree que es posible serle fiel a una misma persona toda la vida.
«La respuesta a esta incógnita está influenciada por una variedad de factores», mantienen en este gabinete de psicólogos de Madrid. «El más importante de ellos es la ausencia de una terapia de pareja en la que se puedan tratar con antelación los problemas debido a los cuales una de las dos partes de la relación siente que no encuentra en la otra persona lo que necesita», afirman.
Los psicólogos de este Centro reconocen que una de las causas más comunes de infidelidad en las relaciones de pareja son las adicciones. «Una persona adicta no se da cuenta de que su adicción puede perjudicar seriamente su relación a la larga. De hecho, el tratamiento de adicciones forma a menudo parte de nuestros programas de terapia de pareja» continúan.
Y es que las terapias de pareja no sólo tienen el objetivo de que ambos cónyuges recuperen la confianza en sí mismos y en su relación. Son un apoyo esencial que en la mayoría de los casos las parejas necesitan, porque «en una terapia de pareja ambas partes deben comprender y reconocer sus errores, y comprometerse a hacer un esfuerzo para que la relación salga fortalecida. Ya se trate de superar una adicción, una infidelidad o un bache económico», concluyen estos psicólogos en Madrid.