Los villancicos navideños se popularizaron por la iglesia católica, con el fin de evangelizar por medio de la música.
Los villancicos han ido evolucionando con el paso del tiempo.
El villancico, como indica su propio nombre, es la canción de villa; la que servía para registrar la vida cotidiana de los pueblos. Según algunos historiadores, este canto surgió por el siglo XIII, siendo difundido en España en los siglos XV y XVI, y en Latinoamérica desde el siglo XVII. En sus inicios fue una forma poética española y lo usaban como registro de los principales hechos de una comarca.
A lo largo de la historia, ha sufrido muchas transformaciones, hasta que en el siglo XIX su nombre quedó exclusivamente para denominar a los cantos que aluden a al Navidad. El villancico no sólo se consolidó como género, sino que se convirtió en el arquetipo de la ‘canción de Navidad’. Su temática se concentra en el niño Jesús, la Virgen María, San José, los Reyes Magos, los pastores y la Estrella de Belén.
Actualmente los más populares son:
«Campana sobre campana«: villancico conocido en todos los países de habla hispana, de origen andaluz y autor desconocido.
«Los peces en el río«: de origen y autor desconocido, aun cuando en algunos párrafos se alcance a percibir cierta influencia árabe.
«Blanca Navidad«: escrito por el compositor Irving Berlín en 1940, incluido en el Record Guinness como uno de los tema más vendidos en la historia.
«Mi burrito sabanero«: conocido también como ?El Burrito de Belén?, fue compuesto por el músico venezolano Hugo Blanco en 1975.
«Marimorena«: nació en el siglo XVIII, se cree que es de origen Español, autor desconocido.
«El niño del tambor«: también conocido como ?El tamborilero?, se le atribuye la autoría a la pianista norteamericana Katherine Kennicott, al traducirlo al inglés de un supuesto original checo en 1941.