Rafa Nadal jugará la final del Open de Australia después de vencer en la segunda semifinal al ruso Grigor Dimitrov en un partido de más de cinco horas y otros tantos sets jugados. Un partido que permite al manacorí volver a una final de un torneo del Grand Slam y en el que se ha impuesto por 6-3, 5-7, 7-6, 6-7 y 6-4.
El tenista español jugará la final contra el veterano Roger Federer, que anteriormente había accedido a la gran final al imponerse a Wawrinka. Ambos jugadores reeditarán la final que ya disputaron en tierras australianas en 2009.
Se da la circunstancia, que ambos jugadores vuelven a lo más alto del tenis mundial después de superar meses de problemas y lesiones que les han tenido lejos de la élite, encabezada por Andy Murray y Novak Djokovic, eliminados antes en el primero de los torneos grandes del año.