València, 15 mar (EFE).- Save the Children y la Falla Frederic Mistral-Murta han impulsado en el barrio valenciano de Benimaclet un monumento fallero sobre el derecho a jugar, uno de los derechos fundamentales de la infancia recogido en la Convención de los Derechos del Niño de Naciones Unidas.
La falla infantil de esta comisión se ha convertido en un altavoz para denunciar la vulneración de este derecho, como por ejemplo a causa del conflicto entre Rusia y Ucrania, según ha informado Save the Children en un comunicado.
«Ahora que el mundo está siendo testigo de todo lo que está pasando en Ucrania, las fallas pueden convertirse en una herramienta fundamental para reclamar los derechos de las niñas y los niños», asegura Rodrigo Hernández, director de Save the Children en la Comunitat Valenciana.
Según Hernández, «desde Save llevamos mas de 100 años trabajando por la infancia que vive en países en conflicto y, lamentablemente, seguimos trabajando no sólo en Ucrania sino también en países como Siria, Yemen o Afganistán».
Las vallas que rodean el monumento infantil cuentan además con casi un centenar de dibujos que han realizado niños y niñas en riesgo de pobreza y exclusión social a los que atiende la entidad en sus programas de intervención, en los que aparecen ellos mismos con sus juguetes favoritos o pidiendo la paz frente al conflicto en Ucrania.
«Es un orgullo mantener, un año más, el compromiso de nuestra comisión con la educación en valores a través de nuestra falla infantil, logrando en este nuevo proyecto generar un diálogo sobre algo tan vital como los derechos de la infancia», afirma Sergio Chillaron, presidente de la falla Frederic Mistral-Murta.
La colaboración entre ambas organizaciones comenzó el pasado mes de diciembre con una recogida de material escolar para los niños y niñas de los programas de acción social que tiene Save the Children en Valencia.
A través de sus programas proporcionan una atención integral a los niños, niñas y sus familias en riesgo de pobreza y exclusión social.