VALENCIA, 7 Feb – Desde las 9 horas de estejueves 7 de febrero, los técnicos del servicio de Movilidad Sostenible han iniciado la actuación necesaria para invertir los dos primeros tramos de la calle Ciril Amorós, entre la calle Russafa y la calle Pizarro. Como se informó a vecinos, AMPA y comerciantes y empresarios de la zona en la reunión informativa mantenida el pasado 23 de enero, la inversión supondrá la mejora de la circulación peatonal y del transporte público en un eje que atraviesan cada día cerca de 20.000 peatones y por el que discurren 8 líneas de EMT diurnas y 2 nocturnas.
A su vez, como se está produciendo en cada actuación realizada por el servicio de Movilidad que comporta una redefinición de la vía, y atendiendo a las demandas de las madres y padres del colegio público San Juan de Ribera, se ha aprovechado la actuación para ampliar espacios peatonales en una calle (entre la calle Russafa y Fèlix Pizcueta) que cuenta con diez vados de garaje, dos de ellos que dan entrada y salida a aparcamientos de grandes dimensiones.
Así, mediante una actuación blanda realizada con pintura, bancos y maceteros, se ampliarán los espacios peatonales existentes en el lado impar de Ciril Amorós, entre los números 1 y 7, ampliando el espacio peatonal al margen que hasta ahora ocupaba el aparcamiento en cordón allí donde no hay vados de acceso a aparcamientos. Del mismo modo, en el lado par se ampliará el espacio peatonal en las zonas de aparcamiento en batería desde los números 2 al 6. Esto, unido a la creación de un estacionamiento de uso exclusivo para motos en horario diurno y de uso mixto para coches y motos en nocturno en el cordón entre los números 9 y 17, permitirá liberar de estacionamiento de motocicletas las aceras en ese tramo de Ciril Amorós y en la calle Russafa (entre las Grandes Vías y Xàtiva), así como el desplazamiento de la única terraza presente ahora sobre la acera de Ciril Amorós al nuevo espacio peatonal ganado en la antigua calzada.
El restante estacionamiento en batería en los números pares de Ciril Amorós quedará como hasta ahora, aunque redefinido de acuerdo al nuevo sentido del tráfico, con la inclusión, a petición de los comerciantes del entorno, de sendas zonas de carga y descarga en los extremos de la calle para facilitar el abastecimiento, tanto de los comercios de Russafa como de los de ese tramo de Ciril Amorós.
La actuación supondrá una mejora sustancial en el espacio peatonal disponible frente a la entrada del colegio público San Juan de Ribera, junto al que hace muchos años se autorizó la creación de un acceso a un aparcamiento público de grandes dimensiones. El espacio peatonal inmediatamente frontal a la entrada del colegio se va ampliar hacia su izquierda tanto en la misma acera de la salida, como en la frontal, protegiéndose las nuevas áreas mediante maceteros y otros elementos. Del mismo modo se instalará una señal vertical P-21 de ‘Atención Colegio’ junto a una limitación a 20Km/h a la entrada a Ciril Amorós desde Fèlix Pizcueta y se añadirá señalización horizontal P-21 previa al paso de peatones en el frontal de la escuela, que también se ampliará.
«Esta actuación supone un enorme paso adelante en la mejora de un entorno en el que, por falta de atención a los vecinos, a los escolares del entorno, a las necesidades de transporte público y a las miles y miles de personas que circulan caminando por ella a diario, se concentran un gran número de intereses desatendidos y despreciados desde hace décadas por las anteriores administraciones. Ahora, realizamos una profunda mejora, que compagina primero las necesidades de peatones, que son el eslabón más frágil en la vía pública, sin desatender las necesidades de los comerciantes del entorno, y sin obviar los derechos de los propietarios de aparcamientos que se autorizaron en ese entorno sin haber tenido la sensibilidad de prever las consecuencias que podrían generar en un entorno tan sensible como ese», ha señalado el concejal de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi.
El concejal ha querido en este sentido «poner en valor la reivindicación de un mejor y más seguro espacio público en los entornos escolares realizado por las madres y padres del colegio público San Juan de Ribera». Una reivindicación, ha añadido, que «deja en evidencia que, a pesar de las campañas apuntando en sentido contrario, la presencia de coches en las puertas de las escuelas son la principal preocupación de las madres y padres de las niñas y niños, y hay una reclamación mayoritaria para que se eviten comportamientos abusivos en los entornos escolares a la que, por lo que toca al servicio de Movilidad Sostenible, estamos atendiendo».
Fuente: Ajuntament de València