La llamada de una niña de 13 años puso sobre aviso al 112. Los hechos sucedieron el pasado fin de semana cuando la menor explicó que sus hermanos abusaban sexualmente de ella de forma habitual y que su padre solía castigarla sin motivo aparente.
El operario del 112 relató los hechos que la niña le contó por teléfono a la policía. Esto hizo que de inmediato una patrulla de los Mossos se personara en el domicilio familiar en Balaguer (Lleida).
Los hermanos, de 18 y 20 años, negaron los abusos sexuales a los agentes. Al igual que el padre quien alegó que la menor lo hacía porque había sido castigada. Aún así, los tres fueron citados en la comisaría de Balaguer para tomarles declaración. La niña está ahora en un centro de menores de Lleida a la espera de lo que determine la investigación.
Los tres argumentaron que la menor se lo había inventado todo en la llamada al 112 tras una discusión con su progenitor y que esta la castigara, según cuentan diversos medios.
Sin embargo, la niña se mantiene en su versión inicial, asegurando que la sometían a tocamientos y le enseñaban los genitales.
La menor ya no vive con su padre y hermanos. De momento, no hay detenciones, solo diligencias informativas. Los Mossos esperan a la exploración médica a la que debe ser sometida la menor para decidir cómo actuar contra los dos hermanos.