Las redes sociales están que arden con este vídeo en el que un monitor, intentando ser gracioso, atemoriza a un niño antes de saltar en tirolina.
Muchos dicen que no es para tanto, que el joven no está muy alto. Otro, en cambio, aseguran que no tiene ninguna gracia y que a nadie le gustaría que le gastasen esa broma.