Valéncia, 06 feb.- El pasado fin de semana la Masía Xamandreu acogió las respectivas exaltaciones de las Falleras Mayores de la falla Convento Jerusalén-Matemático Marzal, Ana Elorriaga López y Rocío Songel García, donde se desveló el secreto mejor guardado, el traje de los máximos representantes de la comisión.
Amparo Fabraha sido la encargada de vestir a todos los representantes para esta ocasión tan especial, poniendo su sello tan característico de elegancia y buen hacer en cada una de las piezas que lucen.
La Fallera Mayor, Ana Elorriaga, impresionó en su llegada con un espolín ‘Arabe’ de Compañia Valenciana de la Seda en color perla rosada del siglo XVIII. Las manteletas son de Hijas de Carmen Esteve, confeccionadas artesanalmente en cadeneta de oro y las puntillas de Antigüedad Me Encanta. El aderezo, modelo balconet, es de la firma Roses. Elegante y sobria para uno de los días más especiales de su reinado. Ana iba peinada y maquilla por Diana Rodrigo.
La acompañaba el presidente de la comisión Paco Segura, también vestido por Amparo Fabra, que lucía un elegante traje de torrentí color vino con chaqueta de seda adamascada y chaleco espolín San Rafael en cobalto.
Rocío Songel, Fallera Mayor Infantil de Convento de Jersalén, estrenó para ese día tan señalado en el que le imponía la banda correspondiente a su cargo, un traje sel siglo XIX confeccionado con una seda en rojo valentino de nombre ‘Valls’ de Compañía Valenciana de la Seda. La pequeña eligió este color en honor a su mantenedora, su prima Marta Ballester García, quién también eligió este color cuando fue Fallera Mayor Infantil de la misma comisión en 2004. Las Manteletas son de Viana y las puntillas deSantos Textil. El aderezo de racimo es de la firma Roses. Diana Rodrigo también fue la encargada de peinar a Rocío para este día tan señalado.
Muy elegante también el presidente infantil, Paulo Torquato, quién estrenó un traje de torrentí en terciopelo azul con chaleco de seda de Vives y Marí con el dibujo ‘Santa Camilla’ en color ivoire.
Un gran trabajo de Amparo Fabra para quién ha supuesto todo un honor vestir a las cuatro representantes de Convento Jerusalén-Matemático Marzal en este momento tan mágico de su reinado, formando parte de esta manera de este año de ensueño.