El laboratorio AstraZeneca aclaró este martes en Brasil que la vacuna anticoronavirus que desarrolló junto con la Universidad de Oxford aún no está a la venta para el sector privado, como sugirió el presidente del país, Jair Bolsonaro.
«En los últimos siete meses, trabajamos incansablemente para cumplir nuestro compromiso de acceso amplio y equitativo a la vacuna al mayor número posibles de países del mundo», dice un comunicado divulgado por el laboratorio anglo-sueco.
La nota aclara que «por el momento todas las dosis de la vacuna están disponibles por medio de acuerdos firmados con Gobiernos y organismos multilaterales del mundo, incluyendo la iniciativa Covax, por lo que no es posible ofrecer vacunas al sector privado».
En el caso de Brasil explica que, mediante un acuerdo firmado con la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz) y el Gobierno federal, el país tendrá acceso a 100 millones de dosis de esa vacuna.
La nota fue difundida después de que, este mismo martes y en una videoconferencia con inversores extranjeros promovida por el banco Credit Suisse, Bolsonaro afirmase que el Gobierno había autorizado a empresas privadas a adquirir dosis de vacunas por su propia cuenta.
«El Gobierno es favorable», declaró el presidente, quien valoró que eso tendría «costo cero» para el Estado.
Explicó además la situación y dijo que, la semana pasada, algunos empresarios le plantearon esa posibilidad al Gobierno, que incluso firmó con ellos «una carta de intenciones favorable».
Según Bolsonaro, la intención era que ese grupo de empresarios comprase «33 millones de dosis de Oxford», que procederían del Reino Unido.
El mandatario apuntó que el compromiso incluía además que las empresas donarían a la red de salud pública la mitad de esas vacunas y que el resto serían aplicadas a sus propios empleados «para que la economía no pare».
Bolsonaro también dijo a los inversores que el Gobierno se empeña para asegurar la vacunación de los 210 millones de brasileños, pese a que muchas veces él mismo ha puesto en duda la verdadera eficacia de los antídotos que existen.
«Ya somos el sexto país que más vacunó en el mundo», aseguró el mandatario sin ofrecer ningún tipo de datos comparativos, y apuntó que «en breve estaremos en los primeros lugares, para darle más seguridad a todos, de modo que la economía no deje de funcionar».
Según los cálculos del Gobierno, Brasil cuenta hasta ahora con apenas unas 12 millones de dosis de vacunas, una cantidad que es insuficiente hasta para inmunizar a aquellos grupos considerados de riesgo, y ya ha aplicado el antídoto a cerca de 700.000 personas.
La crisis sanitaria todavía no ha sido superada y Brasil se mantiene como uno de los países más afectados por la pandemia, con casi 218.000 muertos, 8,8 millones de casos y números crecientes que evidencian la existencia de una segunda ola, cuando aún no se ha dado por terminada la primera.