Simplemente habría que permanecer unos minutos en el interior de cualquier entidad bancaria, el día 25 de cada mes, fecha en que se efectúa el ingreso de las pensiones, para escuchar el constante “quejio” y lamento de los numerosos pensionistas que se acercan a estas entidades a retirar sus paupérrimas pensiones que, con más cara que espalda, el gobierno de Rajoy, han aumentado en un vergonzoso 0,25%, con su ministra de la “cosa”, Fátima Bañez, al frente de semejante atraco, a este colectivo que ha estado toda su vida cotizando para poder sobrellevar una vejez cuanto menos digna. Todo ello, sin que a la mayoría de nuestra clase política, se les remueva un ápice sus maltrechas vergüenzas y conciencias , después de ver y seguir esa lluvia de corruptelas y choriceos varios que cae sobre nuestro país, desde todos los frentes nubosos y que, a día de hoy, aun se siguen ventilando en sede judicial.
A mí personalmente me hace mucha gracia el señor Rajoy, cuando viene justificando todas estas medidas de austeridad, como es el ridículo aumento de un 0,25% de las pensiones, en muchos casos de no más de un solo euro al mes, para 10 millonesde pensionistas cuyas vidas dependen de la iluminada y esperada decisión anual del politicastro de turno que les toque sufrir en sus carnes. Da igual que pertenezca a esa derechona rancia y tradicional ; de esa “izquierdona” tanto vieja como nueva y encoletada que, casi sin ninguna idea coherente digna de resaltar, nos está tocando aguantar estoicamente como el que ve y escucha a un marciano ; o bien, a ese nuevo llamado centro de “iluminatis”, muy monos, guapos y elegantes todos ellos, que parece que han llegado a la política después de pasearse por una pasarela de modelos, mostrándose siempre como los inventores del fuego, la rueda y la aspirina. Y todo eso, por no hablar, por supuesto, de ese nacionalismo descerebrado, cutre y saltimbanqui , que está haciendo que este país se haya convertido en una especie de circo ambulante y permanente de cara a nuestros vecinos y socios de la U.E, en todo un alentador espectáculo político. Sí señor.
Desde luego, la tomadura de pelo, no puede ser más grosera, grotesca y desvergonzada, si tenemos en cuenta que si bien con más cara que espalda, esta medida se ha tomado invocando la estabilidad económica del país y, por ende, del empleo, al mismo tiempo los mismos autores de tal desafuero han sido capaces de destinar más de 60.000 millones sacados de los presupuestos del Estado, en ayudas para esa banca cada día mas rica, prospera y poderosa. Así como han venido permitiendo, si digo bien, permitiendo mirando hacia otro lado, el fraude fiscal de más de 90.000 millones anuales perpetrado por las grandes empresas. Por lo visto, esas mismas que les dan cobijo magníficamente remunerado en sus consejos de administración, a ese ejercito de ex ministros una vez que dejan sus cargos en los diferentes gobiernos de distinto signo. Así todo queda en casa. Pero lo mas alarmante del caso, es que todo este desaguisado fiscal esta contemplado en los reiterados informes de la propia GESTHA: organización de inspectores del propio ministerio de Hacienda. Sin palabras.
Aun siendo todo esto de máxima gravedad, mas farisaico es aun el hecho de que los gestores de la “gaviota marinera”, tengan el morro moruno de aumentar un 0, 25% las pensiones de una clase mayoritariamente desfavorecida, cuando desde el Gobierno se ha dado buena cuenta, no se sabe para que, de más de 65.000 millones de euros de la llamada “hucha” de las Pensiones de la Seguridad Social que, en su día, le dejo el señor Zapatero a señor Rajoy, una vez le cedió el sillón monclovita. Dinero, para más “inri”, de legitima PROPIEDAD de esos mismos pensionistas a los que ahora se les niega por decreto el pago proporcional según el índice del coste de la vida, simplemente para no perder el poder adquisitivo de sus bien ganadas pensiones.
Por lo visto, según el señor Rajoy, no hay dinero para revalorizar las pensiones de nuestros mayores, pero mientras tanto nuestra más que sobredimensionada y desfasada clase política: senadores, diputados nacionales, autonómicos, provinciales etc, etc, etc, ninguno baja como mínimo de los 5 mil “pavos” al mes, como diría un “cheli” del barrio de Vallecas. Total, por asistir un rato semanalmente en sus diferentes instituciones de referencia a divertirse un poco, tocándose las pelotas los unos a los otros en unas sesiones que mas bien se parecen al “Camarote de los hermanos Marx”, con Groucho a la cabeza.
Tal grado de indecencia ya la definió mi admirado compañero y académico Arturo Pérez Reverte, en un escrito-manifiesto que sigue circulando con relevante éxito por todas las redes sociales, aun a fecha de hoy.
Quizás sería conveniente recordar que un contingente electoral de 10 millones de votantes, como pueden ser los actuales pensionistas, fácilmente daría una mayoría lo suficientemente fuerte y amplia como para poder mandar a hacer puñetas a más de un político “satrapilla” de esos que solo saben vendernos humo, mientras ellos se empapuzan a diario de solomillo y langosta. La cuestión radica en quien estaría capacitado para ponerle el cascabel al gato, en cuanto a la coordinación de toda esa colosal fuerza solemne y pomposamente puteada por el BOE y, sobre todo, por quienes lo manejan. Eso si, sean quienes fueren y vengan de donde vinieren.
Finalmente, si una MIERDA de aumento del 0,25%, para las pensiones de un colectivo de 10 millones de pensionistas que han estado cotizando toda una vida, a muchos no les parece un ATRACO a mano armada , que venga San Pancracio y lo vea.