Queridos amigos:
Como supongo que ya sabéis, Fabiola y yo nos hemos separado hace poco tiempo.
No hay un motivo concreto, sino problemas de convivencia.
No hay, ni ha habido terceras personas que nos hayan motivado a tomar esta decisión y si la dificultad de convivir con nuestras distintas personalidades.
Yo confieso que soy complicado en el día a día y asumo toda la responsabilidad en los motivos que han dado lugar a esta decisión.
De Fabiola sólo puedo decir que es una persona maravillosa, gran compañera, estupenda mujer y como madre, es literalmente única.
Espero que aunque vivamos separados sigamos unidos en la amistad de nuestras familias.
Os ruego de corazón que no haya especulaciones porque sencillamente no hay mas motivos que los que os transmito. Os ruego también que al tener dos hijos menores, uno de ellos muy dependiente, respetéis mi decisión de no hablar de este tema. Para mí es muy doloroso por cuánto, como ya os he dicho, mi manera de ser y mi personalidad han sido determinantes en esta separación. Mis hijos tendrán el cariño de sus padres como siempre y entre nosotros siempre habrá cariño y respeto.
Bertín