VALÈNCIA, 21 Nov. (EUROPA PRESS)- Investigadores del Instituto Europeo de Calidad del Sueño, con sede en Valencia, han creado un colchón inteligente, bajo el nombre de ‘Babykeeper’, que previenen la plagiocefalia postural en los primeros meses de vida del bebé e incorporan nanofuelles para mejorar la disipación de calor. Entre otras innovaciones, reduce el riesgo de muerte súbita del lactante por reinhalación de CO2, permite que cambie de color con la fiebre, o inhibe la bacteria responsable de las erupciones cutáneas.
Se trata del primer colchón para bebés con certificado sanitario en Europa y está supervisado por la Agencia Española del Medicamento, según ha informado la firma en un comunicado. El tejido técnico y acolchado extra de su funda tiene nanofuelles que facilitan la evacuación del aire encapsulado entre las fibras, «proporcionando siempre la temperatura ideal».
«Son aspectos importantes si tenemos en cuenta que un bebé duerme unas 9.800 horas en sus dos primeros años de vida, y que la calidad del descanso influirá en su desarrollo», ha apuntado el director de Innovación de ESCI, Tomás Zamora.
El nuevo modelo de colchón Babykeeper aúna cinco años de investigación. Desarrollado íntegramente en España, se presentará Feria Bebés&Mamás de Madrid, que se celebra este fin de semana, y las primeras unidades se servirán en diciembre a través de la web de Babykeeper.
Imagen: BABYKEEPER
El colchón desarrollado por ESCI incorpora un troquel, que está puesto si el bebé no desarrolla la plagiocefalia, pero que se puede quitar fácilmente si se produce la malformación. El hueco que queda, con forma de corona, recoge la cabeza y la libera de presiones, «potenciando así la capacidad de auto-recuperación».
El desarrollo se ha investigado con bebés reales en colaboración con otros institutos de investigación expertos en estos ensayos, que han concluido que que la presión sobre la zona occipital de los pequeños se reducía en un 60% con el nuevo colchón, frente a otros convencionales.
Asimismo, según la compañía, otros avances es que consigue conseguir reducir en un 72% el riesgo de muerte súbita por reinhalación de CO2, en un 48% el riesgo por exceso de calor y en un 60% por problemas de ergonomía. Además, la funda del colchón está elaborada con una tela inteligente capaz de modificar su color cuando detecta que el bebé tiene fiebre, e inhibe en un 99% la presencia de la bacteria estafilococo aureus, responsable de infectar las erupciones en las pieles de los bebés.
El Instituto Europeo de Calidad del Sueño (ESCI), entidad que ha desarrollado la investigación, con sede en Valencia, nació de la unión de varias empresas y profesionales de la salud y el descanso, con el apoyo de diversos institutos tecnológicos, «con el objetivo de estudiar y desarrollar nuevas tecnologías para la mejora de la calidad del sueño y el descanso».