La Guardia Civil ha desarticulado un entramado empresarial que utilizaba a personas con bajos recursos como testaferros para hacer acopio de residuos peligrosos, entre ellos amianto, y despositarlos en una parcela de terreno protegido dentro de la Marjal de Nules (Castellón).
Según han informado fuentes de la Guardia Civil, la investigación comenzó el pasado mes de febrero cuando el Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) de Burriana tuvo conocimiento de que en varias parcelas de la localidad de Nules se acumulaba una importante cantidad de escombros y residuos.
Los agentes comprobaron que se trataba de varios terrenos de la Marjal de Nules, encuadrado dentro de la Red Natura 2000, considerado como zona húmeda y de especial conservación (ZEC) así como de importancia comunitaria (LIC).
Tras realizar una primera inspección ocular observaron que en una extensión de unos 17.000 metros cuadrados de terreno no permeabilizado se almacenaban cientos de toneladas de residuos entre ellos unas ciento cincuenta toneladas de materiales que contenían amianto.
Por todo ello, se inició una investigación en la que los guardias civiles pudieron demostrar que una empresa dedicada a derribos usaba personas de bajos recursos como testaferros. A cambio de dinero actuaban como responsables de la empresa y hacían acopio de los residuos de forma ilícita incumpliendo de manera sistemática la normativa vigente en materia de gestión de residuos.
La tasación económica de la restauración de los terrenos podría sobrepasar el millón de euros, según las citadas fuentes.
La investigación de la Guardia Civil se dio por cerrada el pasado día 14 de diciembre con 3 personas investigadas por un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente, así como el precinto de las instalaciones y el cese de la actividad.
Las actuaciones han sido realizadas por el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Burriana y las diligencias instruidas han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción nº4 de Nules.