El aeropuerto de Ibiza se encuentra al borde de la emergencia sanitaria después de seis días de huelga del servicio de limpieza. El paro fue convocado ante el impago de las nóminas de los trabajadores.
Los pasajeros tienen que soportar los malos olores y sortear la basura y los baños están cerrados porque no se cumplen las condiciones de higiene necesarias. La amenaza de cierre planea sobre el aeropuerto en pleno comienzo de temporada turística.
El pasado viernes se celebró una primera reunión con responsables de AENA, quienes han confirmado la rescisión del contrato con KLE, que adeuda varias nóminas a estos trabajadores.
