Cultura

GALERÍA | El duende flamenco de Tomatito emociona en Les Arts

Publicado

en

Tomatio@Mikel Ponce_Les_Arts

En el barrio de Pescadería de Almería venía al mundo José Fernández Torres en un verano de 1958. Nacía la leyenda de Tomatito. La guitarra se hacía hombre.

El arte lo mamó ya de chico, escuchando el toque de su padre, también llamado Tomate, y el de su abuelo, Miguel Tomate.

De su tío, el legendario tocador Niño Miguel, heredó la magia para ser auténtica leyenda del flamenco. Ese que le ha llevado a ser el mejor embajador del arte de la guitarra flamenca en el mundo.  A tocar en espacios tan emblemáticos como el Carnegie Hall y el Royal Albert Hall.

València se llenaba de arte. El duende se respiraba en la noche ante un público que abarrotaba el Palau de Les Arts.

Seis sillas sobre la escena. En pie recibían con una calurosa ovación a Tomatito. Comenzaba una noche cargada de recuerdos, de magia.

La figura de Camarón y de Paco de Lucía sobrevolaba el coliseo valenciano.

Grandes artistas invitados nos trasladan a otra época, esa en la que el mítico cantaor deslumbraba al mundo. Juan Rafael Cortés Santiago ‘Duquende’ y Antonio Reyes, con sus voces homenajeaban al de San Fernando.

 

Viviré

Tomatito con ‘Viviré’ nos recuerda el legado de su amigo Camarón. Viviré tiene el mismo nombre que la bulería que daba título al disco que  el mejor cantaor de flamenco contemporáneo publicó en 1984, y que contaba con la colaboración del propio guitarrista almeriense y del consagrado Paco de Lucía.

La emoción crecía al ver como el legado de Tomatito quedaba en buenas manos. Ahí, en el escenario su propio hijo, José del Tomate, como segunda guitarra, arrancaba las palmas de los asistentes, ante la sonrisa emocionada de su padre.

Con coros y palmas a cargo de Morenito de Illora y Santiago Cortiñas, y con Israel Suárez ‘Piraña’ en la percusión, Valencia vivía una noche de leyenda.

Tomatio@Mikel Ponce_Les_Arts

 

Click para comentar
Salir de la versión móvil