València, 15 dic (EFE).- La Generalitat ha iniciado la primera de las tres fases de reforma y ampliación del Hospital Clínico de València, en las que se invertirán unos 110 millones y permitirán duplicar su capacidad: de 67.000 m2 actuales a 108.000, de 495 a 966 camas (aforo máximo), de 19 a 25 quirófanos y de 33 a 66 camas de UCI.
«Con esta inversión, el Hospital Clínico de València se convertirá en uno de los centros sanitarios de referencia de toda España», ha señalado el president, Ximo Puig, en el acto de presentación de estas obras, en el que ha estado acompañado por la consellera de Sanidad, Ana Barceló, y la vicealcaldesa, Sandra Gómez.
Las obras se inician, ha recordado Barceló, con la demolición de la parte trasera del edificio de la antigua escuela de ingenieros técnicos agrónomos, tres años después de que el Consell adquiriese este espacio a la Universitat Politècnica de València.
Las obras, divididas en tres fases, supondrán un desembolso para el Consell de 94 millones de euros, una cifra que ascenderá hasta los 110 millones si se tiene en cuenta el equipamiento sanitario que será necesario adquirir.
La directora general de Infraestructuras, Carmelina Pla, ha explicado que la primera de las fases, que ya se ha activado, consiste en la construcción de un nuevo edificio de cinco alturas, de 12.900 metros cuadrados que dispondrá de 132 habitaciones, 120 de las cuales podrán ser ocupadas por dos pacientes si fuese necesario, en las plantas 3, 4 y 5, además de 37 camas de UCI en box aislados.
Esta fase tiene un coste de 30 millones de euros y las obras, que ya se han iniciado, se espera que estén concluidas en 2021.
La segunda fase, que se desarrolla de forma paralela a la primera, implica la reforma de la antigua sede de la escuela de ingenieros técnicos agrícolas -se preserva el volumen y los patios de este edificio de los años 60- para que acoja las consultas externas y libere espacio en los edificios actuales.
Además, este espacio acogerá un hospital de día para enfermos oncológicos con 88 plazas.
Esta segunda fase tiene un coste de 36 millones de euros y estará concluida en 24 meses.
La tercera fase supondrá la reforma del actual edificio que acoge las consultas externas (por donde pasan 360.000 personas al año), para convertirlo en un espacio de hospitalización de nueve plantas y 136 habitaciones individuales (podrán acoger hasta 272 camas en caso de que sea necesario).
Esta fase no se iniciará hasta que no se produzca el traslado de las consultas externas al nuevo edificio, previsiblemente en 2023.
Preguntado sobre las críticas del Colegio de Arquitectos al derribo de las naves anexas a la antigua Escuela de Agrónomos, Puig ha asegurado que respeta su opinión, pero que «todas las intervenciones se hacen con el respaldo de las instituciones competentes» y que «se va a salvar el edificio de la escuela».
Sobre las obras de ampliación, el president ha insistido en que «lo más importante de la Sanidad siempre son sus profesionales», a quienes ha agradecido el esfuerzo de los últimos meses debido a la pandemia y ha mostrado su voluntad de «ofrecerles las mejores instalaciones posibles».