(EFE).- El Partido Popular va a celebrar una convención nacional itinerante en la que durante siete días los de Pablo Casado buscarán «cincelar» la alternativa a Pedro Sánchez planteando mesas de debate ideológico en varias ciudades que culminarán el fin de semana del 2 y el 3 de octubre en València.
El presidente del PP ha presentado este lunes en Madrid la convención, con el lema «Creemos en España. Creemos un futuro en libertad», con el que los populares aluden tanto al verbo creer como al verbo crear. La meta es que sus principios ideológicos se transformen en soluciones para abordar «los problemas reales de los españoles».
El PP, que coincide con el PSOE en la elección de València para su convención, organizará el debate en torno a los cinco pilares ideológicos del proyecto de Casado: España, libertad individual, propiedad privada, estado de derecho e igualdad de oportunidades.
Cada eje contará a su vez con cinco mesas de debate, abiertas a la sociedad y con las que el PP quiere mostrar su transversalidad. Las mesas se celebrarán cada día en una localidad donde el PP gobierna -cinco días consecutivos- hasta culminar en València con una estructura más clásica para la convención.
Casado ha llamado a una convención que «debe tener mucho de rebelión cívica, democrática y serena», frente a un «intervencionismo sin sentido» y «la ruptura de la ley y los lazos nacionales» que a juicio del principal partido de la oposición se pretende «imponer».
El PP quiere dibujar su proyecto para España dando respuestas a debates que en los últimos veinte años se han quedado colgados en el partido, sin esquivar temas -se hablará por ejemplo de feminismo o de sostenibilidad- y explicando cual es su propuesta, en positivo y no a la contra.
Así lo ha trasladado Casado, cuando ha subrayado que el PP no quiere que el «malestar» sea su camino electoral, y que tampoco quiere el «voto del rechazo», sino el del «reformismo» y el de que quieren volver a construir y cambiar las cosas.
El líder del PP ha llamado a los suyos a no instalarse en la «moral de resistencia» sino a abrir las puertas del partido y trabajar «a pie de calle» y a «pie de obra».
Y ha vuelto a reivindicar al PP como un proyecto «razonable y centrado», que se ensanche desde su derecha y desde su izquierda, al tiempo que ha llamado a la concordia. En los debates buscarán contar con expertos y representantes de la sociedad civil que no se asocien con el partido conservador.
Y ante los dos años que faltan hasta las próximos elecciones ha pedido a los suyos un trabajo diario porque «ni hay atajos al futuro ni el presente tiene puertas de emergencia para escapar de los errores que se cometen en él».
La presentación de la convención, a la que han asistido dirigentes como el número dos de Casado, Teodoro García Egea, los portavoces en el Congreso y el Senado, Cuca Gamarra y Javier Maroto, o el portavoz nacional y alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, se ha iniciado con un vídeo en el que el PP aludía a la educación, la justicia independiente o oportunidades para todos.