València, 5 oct ( Official Press – EFE).- Save the Children alerta de que en 9 de cada 10 casos de agresiones sexuales contra la infancia en la Comunitat Valenciana el autor es una persona del entorno familiar o conocida del niño o niña.
El dato se conoce después de analizar más de 400 sentencias judiciales
Así se desprende del último informe de esta organización, «Por una justicia a la altura de la infancia. Análisis de sentencias sobre abusos sexuales a niños y niñas en España», en el que se han analizado cerca de 400 sentencias judiciales de casos de este tipo de violencia en nuestro país.
Según los últimos datos del Ministerio del Interior, en 2021 se presentaron 8.317 denuncias por delitos contra la libertad sexual que tenían como víctima a niños, niñas y adolescentes, 1.135 de ellas en la Comunitat Valenciana.
«Se estima que solo el 15 % de los casos de abuso sexual llega a denunciarse, por lo que estos datos sólo son la punta del iceberg», advierte el director de Save the Children en la Comunitat Valenciana, Rodrigo Hernández, en un comunicado de esta organización.
«Todavía existe la creencia colectiva de que esto no ocurre en nuestro entorno y que, si sucediera algún caso, nos daríamos cuenta, pero los datos nos dicen claramente que no es así», lamenta.
Más del 60 % de los casos son niñas de 10 a 14 años
El estudio señala que la mayoría de casos las víctimas tienen entre los 10 y los 14 años, y que en más del 60,8 % de los casos la víctima es una niña o una adolescente.
Otro dato preocupante, advierte, es el tiempo de duración de los procesos, ya que el 58 % de los procesos judiciales por abusos sexuales a niños y niñas en la Comunitat Valenciana no se resuelven antes de los dos años, y se pueden alargar hasta los cinco años.
Save the Children denuncia que hay víctimas que siguen teniendo que declarar más de una vez, llegando a hacerlo, antes del juicio, hasta tres veces, ante la Policía, fiscalía y el juzgado.
Solo en el 27,8 % de los casos se hace referencia al uso de la prueba preconstituida, es decir, la grabación del testimonio para que no tengan que repetir esa declaración en reiteradas ocasiones.
Pone como ejemplo el caso de Carmen Corrales, gaditana de 26 años, que ha denunciado haber sufrido abusos sexuales desde los 10 hasta los 14 años por parte de su abuelo, y tuvo que declarar cinco veces ante diferentes instituciones siendo todavía menor de edad.
«Durante el proceso yo me sentí superacompañada por parte de mis padres y de mis hermanas, pero por la justicia y demás no. A mí nadie me acompañó, nadie me indicó dónde tenía que ir, lo que tenía que hacer… nada. Declaré, pero me sentí bajo presión», relata la joven.
Una justicia a la altura de la infancia
Save the Children pide al Gobierno que desarrolle una legislación específica que marque el camino para esta justicia especializada, que pueda garantizar los derechos de los niños y niñas que han sido víctimas de cualquier tipo de violencia, como son los abusos sexuales.
Reivindica la implantación de juzgados especializados en atención a la infancia víctima de violencia; la creación de una Fiscalía específica de violencia contra la infancia, que participe en todos los procesos donde haya un niño o niña víctima; y la asistencia jurídica a las víctimas, acompañándolas desde el inicio hasta el final del proceso y asegurando su gratuidad en los casos que marca la ley.
Añade que uno de los aspectos básicos de esta especialización de la Justicia es la realización de exploraciones y pruebas preconstituidas, con el objetivo de eliminar actuaciones y declaraciones innecesarias y evitar la revictimización de los niños y niñas víctima.
A nivel autonómico, la organización propone, entre otras medidas, la formación obligatoria y especializada sobre violencia y protección de la infancia de todos los profesionales que trabajan con la infancia (ámbito judicial, educativo y sanitario).
Asimismo, reclama el desarrollo de políticas de salvaguarda infantil y de entornos seguros que garantice su seguridad y bienestar y prevengan cualquier forma de violencia, incluidos los centros de protección.
«Casas de los niños»
Save the Children apuesta también por continuar impulsando en la Comunitat Valenciana el modelo nórdico Barnahus («Casa de los niños» en islandés), un modelo de atención integral donde todas las instituciones que intervienen en un caso de abuso sexual infantil se coordinan y trabajan bajo el mismo techo para evitar la victimización secundaria.
La organización valora de forma positiva que el nuevo Consell haya manifestado su compromiso en continuar impulsando el modelo esta legislatura.