Los juguetes tecnológicos y los gadgets se han convertido en protagonistas de las peticiones a los Reyes Magos de los niños y jóvenes españoles. La entidad benéfica “Fundación Oír Es Clave” (www.fundacionoiresclave.org) aconseja a los padres controlar el uso de dispositivos y juguetes electrónicos de sus hijos para que no resulte contraproducente para su salud y alerta sobre su uso desmedido.
La Academia Americana de Pediatría alerta sobre la sobreexposición de los niños a los medios digitales y recomienda tiempos máximos según la edad del niño. Los pequeños, menores de 18 meses no deberían estar expuestos a ellos; ya que los bebés son los más vulnerables a las pantallas. Evitar la exposición a estos dispositivos puede beneficiar el desarrollo del cerebro y las conexiones saludables entre padres e hijos.
Por su parte, los niños de entre 2 y 5 años no deberían sobrepasar la hora diaria de uso de dispositivos tecnológicos; y a partir de los 6 años los padres deben decidir sus propios tiempos y controlar el uso que realizan los niños. Las luces de las pantallas y los sonidos que emiten los dispositivos sobreestimulan a los niños de corta edad y pueden causarles problemas de angustia y dificultar que concilien el sueño.
La Fundación Oír Es Clave llama la atención sobre las conclusiones del estudio científico Association of the Type of Toy Used During Play With the Quantity and Quality of Parent-Infant Communication en el que se ha comprobado que el uso de juguetes tradicionales y libros promueve el desarrollo temprano del lenguaje y el tiempo de calidad que comparten padres e hijos frente a los juguetes sonoros y electrónicos. Este estudio avala que jugar con dichos juguetes se asocia con la disminución de la cantidad y la calidad de la lengua de entrada en comparación con el uso de libros y juguetes tradicionales. Por ello, para el día de Reyes CLAVE recomienda a los padres priorizar en pasar tiempo de calidad con sus hijos y dedicarlo a la conversación, la lectura o a compartir juegos creativos y aconseja optar por juguetes más tradicionales: puzles, juegos de mesa, cuentos ilustrados, etc. que potencien la imaginación y el desarrollo cognitivo de los más pequeños.
El uso de consolas de videojuegos, tablets y otros dispositivos electrónicos nunca debe reemplazar a actividades más saludables como la práctica de deportes, la interacción social, ni restar horas de sueño y descanso. CLAVE anima a los padres a ser el mejor ejemplo para sus hijos y enseñarles la mejor manera de emplear la tecnología como herramienta para aprender, crear y descubrir cosas. Hay numerosas aplicaciones y webs dedicadas a la educación con recursos interactivos para el aprendizaje de los niños. Aun así, es conveniente la supervisión de los más pequeños siempre que se conecten a Internet, además del uso de restricciones por edad que impidan su acceso a contenidos inadecuados.