Todo ha quedado en un susto y algunos expertos dicen que es hasta normal y habitual que, tras un atentado como el del jueves en Barcelona, crezca la psicosis y el exceso de seguridad. Cualquier medida preventiva es bien recibida. Paciencia en la ciudadanía y respiro en las autoridades. Lo cierto es que a mediodía del jueves una mochila sospechosa en un bus turístico de Barcelona hacía saltar las alarmas y provocaba incluso que se evacuara la Plaça de Catalunya.
Posteriormente, y después de hacer las pertinentes investigaciones, se comprobaba que la mochila no tenía ningún tipo de artefacto y tan sólo se encontraron en ella efectos personales de la persona propietaria. Los Mossos d’Esquadra, a través de su cuenta de Twitter, eliminaban la alarma y anunciaban el establecimiento de la normalidad en la zona:
FOTO: @miremclean10 en Twitter