La historia de amor de Ben Affleck y Jennifer Lopez, tan conocida, parece llegar a su fin una vez más.
Los persistentes rumores de crisis en su famoso matrimonio han sido una constante en su relación sentimental. Aunque ambos han ignorado las noticias de su separación, ahora más que nunca este futuro podría hacerse realidad.
El último movimiento de la pareja de actores podría ser decisivo y dejar claro que su situación amorosa está en peligro y que podrían estar ante un «divorcio inminente», según ha señalado el portal TMZ.
La pareja -que comenzó a salir en 2001, rompieron en 2004, retomaron su relación en 2021 y se casaron en 2022- intentan deshacerse de su lujosa mansión de casados de Wallingtong Estates, en Beverly Hills, la cual adquirieron en 2023.
Fuentes cercanas a Affleck y la cantante aseguran que el actor de Hypnoticya se ha instalado en una vivienda de Brentwood mientras que la de El Bronx está buscando un nuevo hogar.
Y es que en las últimas semanas, la vivienda ha aparecido en diversos portales inmobiliarios, lo que ha hecho saltar todas las alarmas. Por el momento, no han encontrado ningún comprador que quiera ser el nuevo dueño de la casa que Affleck y Lopez han compartido durante un año.
Piden cerca de 65 millones de dólares -60.525.400 euros aproximadamente-. A ellos les costó unos 55 millones de euros.
La propiedad cuenta con 12 habitaciones, 24 cuartos de baño, 15 chimeneas, un spa, una sala de cine, una bodega de vinos, un gimnasio y una casa más pequeña con dos dormitorios, entre otras cosas.
Cabe recordar que los actores tardaron cerca de dos años en encontrar la casa de sus sueños en la que comenzar sus vidas como marido y mujer. Llegaron a ver en torno a 80 viviendas más hasta dar con esta.
¿Posible estrategia?
Es evidente que JLo no atraviesa su mejor momento, ya no sólo por su aparente divorcio con Affleck, también por el fracaso y cancelación de su última gira musical, que tenía previsto arrancar el 26 de junio en Orlando, Florida.
«Estoy completamente desconsolada y devastada por decepcionaros. Por favor, quiero que sepáis que no haría esto si no sintiera que es absolutamente necesario. Os prometo que os lo compensaré y estaremos todos juntos de nuevo. Os quiero tantísimo a todos. Hasta la próxima», señaló.
En medio del revuelo, The Mirror apuntó este pasado 4 de junio que los problemas de las estrellas de Hollywood podrían ser una estrategia de marketing para «distraer la atención de la caída de su carrera», afirmaron varias fuentes al medio.
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