València, 27 abr (EFE).- Si la evolución epidemiológica sigue su tendencia positiva y el proceso de vacunación avanza, habrá un «muy buen verano» en turistas nacionales e internacionales y en ocupación, con continuidad en el otoño, según el presidente de la Confederación de Empresas Turísticas de la Comunidad Valenciana, Luis Martí.
A partir del decaimiento del estado de alarma el 9 de mayo y el levantamiento perimetral de la Comunitat Valenciana anunciado por el president de la Generalitat, Ximo Puig, para esa fecha, y con el ritmo que está adquiriendo el proceso de vacunación, el turismo va a empezar a moverse de forma intensa en cuanto se reabra la posibilidad de viajar.
No obstante, Martí advierte en una entrevista con EFE de que estas expectativas se cumplirán siempre y cuando la vacunación siga su ritmo y la situación epidemiológica de la Comunitat se mantenga como en las últimas semanas, con la incidencia acumulada a catorce días más baja de España: eso puede «jugar mucho a nuestro favor», afirma.
Desde la perspectiva empresarial, se confía en que el segundo semestre del año, después de un primero «pésimo», permita recuperar una mínima rentabilidad para el negocio y recuperar a los trabajadores que están en ERTE, para intentar llegar a beneficios ya en 2022.
«Es fundamental en la segunda parte de este año no volver a incurrir en pérdidas y lograr una rentabilidad para sacar adelante el negocio, y en 2022 empezar a tener beneficios», señala Martí.
La Comunitat Valenciana mantiene su atractivo para la demanda y está «en plazo» para tener «muy buen verano» y continuar «con un buen otoño» en un contexto de «normalidad» dentro de la pandemia, en el que los ciudadanos han interiorizado el uso de las mascarillas y las medidas de prevención.
No será comparable a las cifras de 2018 y 2019 de media de ocupación anual del 80 % en la Comunitat Valenciana, que quizá no se recuperen hasta 2022 o 2023, pero hay que tener en cuenta que ahora el escenario es «otro».
Martí prevé que los hoteles volverán a abrir entre mayo y junio y para antes del verano el porcentaje de apertura alcance el entorno del 90 %, no solo pensando en la temporada de verano sino también en los meses posteriores en el caso de los hoteles urbanos.
En 2020 hubo hoteles en la ciudad de València que no abrieron sus instalaciones por miedo a la situación en el «posverano», como finalmente ocurrió, pero este mes de abril y mayo se afronta de otra manera pues, aunque no se cumpla el ritmo de vacunación para los meses de verano, está el otoño por delante.
Con estos pronósticos, los empresarios turísticos están pensando ya en recuperar a sus trabajadores de los ERTE. «Estamos pensando en cómo recuperar la normalidad, y es que todos los empleados estén trabajando», señala.
Según Martí, se ha detectado interés en las cinco áreas más importantes de emisores de turistas a España: el mercado británico, francés, italiano, alemán y de Países Bajos.
Y España tiene ventajas frente a competidores como Turquía, Croacia, Egipto o Grecia, que van más allá del atractivo de ser destino de sol y playa y que se basan en la calidad de sus infraestructuras y de la sanidad y la seguridad ciudadana.
En cuanto al turista nacional, se ha recuperado esa parte de turismo que no ha podido viajar a otros países por la pandemia y que ha visto «maravillas de una España que desconocía». «El turista nacional ha descubierto su propio país o comunidad, y eso se va a notar este verano», según el presidente de la confederación.
«Cuando funcionamos, lo hacemos muy bien, y en todos los destinos, en sol y playa, urbanos, interior…», señala Martí para añadir que todos los destinos de la Comunitat Valenciana «tiran» de la demanda, algo que un solo producto no consigue, y que se ha logrado gracias a la diversificación de la oferta que ha conseguido esta comunidad.