La plantilla de supermercados Lidl ha amenazado con que podrían secundar una huelga en diciembre si los directivos de la empresa ignoran sus peticiones laborales. En concreto, se trataría de una huelga de los 12.500 empleados de la empresa.
Según ha reivindicado la plantilla a la cúpula de los supermercados, las tiendas estarían incumpliendo su obligación de informar a los trabajadores sobre los horarios y turnos con la suficiente antelación. En este sentido, los sindicatos han acusado a Lidl de trabjar sin ninguna organización y de informar a los empleados de constantes reestructuraciones del horario debido a que cuentan con una plantilla muy ajustada para el nivel económico de la empresa.
“La empresa tiene que informar con una semana de antelación los horarios y turnos del mes siguiente, pero eso se incumple constantemente. Incluso hay trabajadores que asisten a sus puestos de trabajo y son informados el mismo día que sus horarios han sido modificados”, ha manifestado Isabel García, representante de Comisiones Obreras en Lidl.
Asimismo, los sindicatos han asegurado que las peticiones que llegan de imposición de productividad desde Alemania afectan directamente a los calendarios de trabajo en los supermercados nacionales. Y, por tanto, los trabajadores pagan estos desajustes.
Por su parte, los trabajadores y los sindicatos se concentrarán y el próximo 4 de diciembre frente algunas tiendas de la compañía y, en el caso de que la cúpula de la empresa no tome medidas, convocarán una huelga para el mes de diciembre.