VALÈNCIA, Jun. (EUROPA PRESS)-Pedro Sánchez ha dado instrucciones para que España cumpla con los compromisos internacionales en materia de crisis humanitaria y ha dado instrucciones para que España acoja el barco Aquarius, en el que se encuentran más de 600 personas abandonados a su suerte en el Mediterráneo, ha informado el Palacio de la Moncloa.
El destino de este barco será el puerto de Valencia, previa coordinación con la Generalitat valenciana.
En este sentido, la vicepresidenta de la Generalitat Valenciana y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha ofrecido la ciudad de València para acoger a los cientos de migrantes del barco anunciando que la sociedad valenciana «no deja a nadie a la deriva».
El Gobierno de España ha anunciado que ofrecerá a la ONU Valencia como «puerto seguro» para el barco ‘Aquarius’, que navega con más de 600 inmigrantes y refugiados rescatados por MSF y Sos Mediterranée, cuya entrada a Italia ha sido impedida por el nuevo ministro del Interior, Matteo Salvini.
Poco antes de que el Ejecutivo central hiciera este anuncio, Oltra había expresado ante los medios de comunicación que estaba esperando el sí del Ejecutivo central para poder albergar a estas 629 personas porque València «quiere abrir ese corredor de la esperanza en el Mediterráneo».
En este sentido, Oltra se muestra convencida de que el Gobierno de Pedro Sánchez tiene «sensibilidad» respecto a la situación de las personas refugiadas, «no como el anterior Gobierno del PP que nos cerró todas las puertas».
Asimismo, ha señalado que las autoridades valencianas tienen el dispositivo de acogida preparado «desde hace mucho tiempo» y que espera que la idea sea «bien recibida» también por las once comunidades que en su día firmaron un manifiesto expresando su deseo de acoger refugiados.
Las autoridades valencianas ya han hablado además con la Autoridad Portuaria, «que se ha implicado», y con las entidades de solidaridad y personas migrantes que colaborarán en el dispositivo de acogida.
«FOSA COMÚN DE LA VERGÜENZA»
Mónica Oltra ha enfatizado que «no es posible que en el siglo XXI haya 629 personas en un barco a la deriva en el Mediterráneo, un Mediterráneo que se está llevando miles de vidas y que se está convirtiendo en una fosa común de la vergüenza, cuando siempre ha sido un puente entre personas y culturas».
«València puede ser la puerta de entrada para que se acabe el calvario de estas personas y podamos acogerlas en una sociedad abierta y cálida, que no deja a nadie a la deriva en el Mediterráneo. Esperemos que esta vez sí ese barco pueda llegar a València y la sociedad valenciana pueda decirles: ‘Lo peor ha pasado y vais a emprender una nueva vida lejos del horror que habéis tenido que pasar'».
Finalmente, la dirigente valenciana ha recordado que un centenar de las personas que van a la deriva a la embarcación son niños y que también hay mujeres embarazadas y que solo