Lara Álvarez estaba cantando un tema del puertorriqueño, Calypso, cuando, de repente, la puerta se abrió y Lara no podía creer quién entraba: nada menos que Luis Fonsi en persona. Su reacción: «¡Me voy a desmayar!». Lara no puede contener las lágrimas de emoción, y es que, tal y como le explicó ilusionada al cantante, su música ha estado con ella durante muchos años de su vida.