Durante estas fechas navideñas es normal enviar mensajes y tarjetas para desear felices fiestas y próspero año nuevo.
Pero lo que sucedió el centro médico Askern Medical Practice (Doncaster, Reino Unido) al querer transmitir buenos deseos se convirtió en una pesadilla.
Según se ha sabido el centro envió por error a miles de pacientes un comunicado en el que se les notificaba que padecían una enfermedad terminal. En realidad, la intención del centro médico era enviar mensaje automatizado de «Feliz Navidad».
Los hechos sucedieron el pasado 23 de diciembre, cuando el hospital envió por error una notificación de cáncer a la mayoría de sus ocho mil pacientes. En concreto, el mensaje avisaba al paciente de que padecía un «cáncer de pulmón agresivo con metástasis» y aconsejaba rellenar un formulario especial para personas con este tipo de enfermedad.
Pacientes que esperaban sus resultados
Muchos de los pacientes que recibieron el mensaje se habían realizado pruebas médicas recientemente y estaban a la espera de los resultados. Y la noticia de que padecían un cáncer agresivo fue terrible.
«Me acaban de quitar un lunar y estaba esperando el resultado de una biopsia y había estado en el hospital porque mi prueba de frotis resultó anormal, así que sí, estaba muy preocupada», afirmó la paciente Sarah Hargreaves a la BBC. «Me sentí mal y me derrumbé«, añadió.
Carl Chegwin, paciente de Askern, se quejó del error que había cometido el centro médico e incluso pensó que aquello era una «broma». «Me pilló completamente por sorpresa. No es frecuente que vaya al médico y luego, de la nada, es cáncer», explicó Chegwin y añadió: «Ellos acaban de decirle a la gente unos días antes de Navidad que tienen cáncer de pulmón terminal. No pueden hacer eso«.
Las personas que recibieron la notificación, entraron en pánico al leer el mensaje de texto y, de inmediato, llamaron al centro médico. Sin embargo, estos fueron puestos en espera. Una hora después del primer mensaje, los pacientes recibieron un segundo mensaje que les explicaba que el primer mensaje había sido un error y que, en su lugar, el centro médico quería desearles una feliz Navidad.
«¿Qué pasa si ese mensaje estaba destinado a alguien, y luego se le dice que es un mensaje de Navidad y, después, se le vuelve a comunicar que ‘Oh no, eso en realidad estaba destinado a ti’?», se preguntó Chegwin, anticipando otra posible equivocación del centro médico.