Conoce el drenaje linfático y sus beneficios para la salud aplicando de manera continuada esta técnica. En este caso estaremos hablando de un tipo de masaje con movimientos suaves que estimula el sistema linfático para el ayudar al movimiento de la linfa, que cuenta con un líquido rico en proteínas. El movimiento de dicho líquido, constituye la linfa ayuda a eliminar toxinas y desechos que se acumulan en el organismo.
Conoce el drenaje linfático y sus beneficios para la salud
Dentro de la fisioterapia, el drenaje linfático manual (DLM), es un tipo de tratamiento no invasivo. Que se suele realizar sobre todo, de forma manual. Pero, además de ello, existe una aparatología denominada presoterapia que es específica para realizar aquella misma función y no ser practicada por un profesional.
Desde un punto de vista sanitario, valorando el efecto y el éxito del método, un profesional siempre podrá focalizarse en determinadas zonas si identifica una mayor afección, adaptando el tratamiento en función de los resultados. En cambio, en la presoterapia los cambios de presión en las botas o manguitos neumáticos son de tipo continuo, lo que impide la adaptación o personalización del servicio.
Aunque, son técnicas complementarias, se puede afirmar que un drenaje linfático manual realizado por un fisioterapeuta especializado siempre será más efectivo y seguro que uno realizado con máquina.
¿Qué es el drenaje linfático?
Los masajes linfáticos manuales, también denominados como drenaje linfático, son una técnica terapéutica de masoterapia que se focaliza en realizar masajes suaves sobre distintas zonas del cuerpo para estimular el sistema linfático, con el fin de mejorar la circulación de la linfa. Un líquido que transporta desechos y toxinas fuera del cuerpo. La función de esta técnica es la de mejorar la contracción automática de los vasos linfáticos, ayudando a eliminar edemas y otras alteraciones derivadas de una mala circulación de la linfa.
El sistema linfático
El sistema linfático se encarga de transportar los deshechos derivados de la nutrición de las células hasta la sangre, que posteriormente los lleva hasta el sistema excretor para eliminarlos. Los edemas aparecen cuando el sistema linfático no puede depurar ciertas zonas, por lo que los líquidos y sustancias se estancan. La presión que se aplica durante el drenaje linfático ayuda a arrastrar los líquidos retenidos hacia el sistema circulatorio y la sangre. Además de transportar las sustancias de desecho de las células, el sistema linfático también actúa como defensa del organismo; esto se debe a los ganglios linfáticos, unas estructuras que se sitúan en varias zonas del sistema y que actúan depurando los agentes patógenos y neutralizando los daños que puedan producir.
El hecho de que se acumulen líquidos en los tejidos puede deberse a varias causas, como un mal funcionamiento del propio sistema linfático, natural o inducido (este último debido normalmente a una extirpación de ganglios linfáticos, algo frecuente en el tratamiento quirúrgico de ciertos tumores). También se pueden acumular líquidos por causas que no tienen que ver con la linfa, como en el caso de edemas venosos, lipedemas, edemas traumáticos, edemas durante el embarazo, cirrosis hepática, malnutrición, etcétera.
Los beneficios de los masajes linfáticos incluyen:
1.Mejora de la circulación linfática
El masaje linfático estimula el flujo de la linfa a través del sistema linfático, lo que puede ayudar a eliminar toxinas y desechos del cuerpo de manera más eficiente.
2.Reducción de la retención de líquidos
Los masajes linfáticos pueden reducir la retención de líquidos al estimular la eliminación de exceso de líquidos en el tejido corporal, lo que puede ser beneficioso para personas que sufren de edema.
3.Desintoxicación
Ayuda en la eliminación de toxinas acumuladas en el cuerpo, lo que puede tener un efecto positivo en la salud general y el bienestar.
4.Mejora de la función inmunológica
Al estimular el sistema linfático, los masajes linfáticos pueden fortalecer el sistema inmunológico y ayudar al cuerpo a combatir infecciones y enfermedades.
5.Alivio del estrés y la ansiedad
Los masajes en general son conocidos por su capacidad para reducir el estrés y promover la relajación. Los masajes linfáticos no son una excepción, y pueden ayudar a aliviar el estrés y la ansiedad.
6.Mejora de la circulación sanguínea
Aunque el enfoque principal es el sistema linfático, los masajes linfáticos también pueden mejorar la circulación sanguínea, lo que puede contribuir a una mejor oxigenación de los tejidos y una piel más saludable.
7.Alivio de la hinchazón y la inflamación
Puede ser efectivo para reducir la hinchazón y la inflamación en diversas partes del cuerpo, como las piernas, los tobillos y el abdomen.
8.Mejora de la apariencia de la piel
Los masajes linfáticos faciales pueden ayudar a mejorar la apariencia de la piel al reducir la hinchazón y mejorar la circulación sanguínea, lo que puede dar como resultado una piel más luminosa y saludable.
9.Alivio de problemas de salud específicos
En algunos casos, los masajes linfáticos se utilizan como parte del tratamiento para afecciones médicas específicas, como linfedema, problemas circulatorios y ciertos trastornos linfáticos.
Es importante destacar que los masajes linfáticos deben ser realizados por un terapeuta calificado y con experiencia en esta técnica, ya que se requiere un conocimiento específico del sistema linfático para realizarlos de manera segura y efectiva. Antes de someterse a un masaje linfático, es aconsejable hablar con un profesional de la salud, especialmente si tienes afecciones médicas preexistentes.
¿Cómo realizar un drenaje linfático adecuadamente?
El masaje consistirá en un drenaje linfático y debe seguir una serie de pautas para que cumpla con su función:
- Debe ser un masaje muy suave e indoloro, para poder activar la linfa.Proporciona un efecto relajante y placentero.
- Las manos deben hacer un movimiento lento y repetitivo. Donde la guía sea en dirección de los conductos linfáticos.
- Este tipo de masaje durará como mínimo una hora.