PORTADA OFFICIAL PRESS

Desarticulado un grupo que cultivaba 12.000 plantas de marihuana en naves industriales en Chiva

Publicado

en

VALÈNCIA, 1 Feb. (EUROPA PRESS) –

Agentes de la Guardia Civil han detenido a cinco hombres que presuntamente formaban una organización criminal que cultivaba cerca de 12.000 plantas de marihuana en naves industriales de Chiva (Valencia). La operación, denominada ‘Greenboard’, ha permitido intervenir efectos y droga por más de siete millones de euros, en la mayor incautación de esta droga en la provincia, según ha informado el instituto armado en un comunicado.

En total, los agentes se han incautado de 11.863 plantas de marihuana, cuyo peso ronda los 1200 kilogramos, y 25 kilos de marihuana seca envasada en paquetes al vacío y dispuestos para su envío, distribución y consumo. La organizaciión usaba baves situadas en zonas «poco transitadas», en un lugar tranquilo y, para evitar ser descubierto, las mantenían cerradas y se guiaban con velas por el interior.

Los detenidos son cinco hombres de nacionalidad china y edades comprendidas entre los 28 y 53 años, a los que se les imputan, en distinto grado de implicación, los delitos de organización criminal, contra la salud pública por cultivo, elaboración y tráfico de drogas, defraudación de fluido eléctrico y de agua. Todos ellos ya han pasado a disposición de Juzgado número 2 de Requena (Valencia).

Los agentes de la Guardia Civil encontraron un «sofisticado» sistema para la producción de marihuana, compuesto por generadores de electricidad, climatizadores, extractores de aire, lámparas de alta potencia, transformadores, productos específicos para el cultivo, sistemas de alarma, estaciones meteorológicas y una gran cantidad de herramientas y material.

Esta infraestructura permitía que los cultivos de marihuana de las naves mantuvieran unas condiciones de humedad y temperatura «óptimas para el cultivo intensivo en interior de esta droga», con un elevado poder de producción.

OPERABAN EN NAVES INDUSTRIALES

Las investigaciones comenzaron a finales del pasado mes de noviembre, cuando los agentes de la Benemérita tuvieron sospechas de que varias naves de un polígono industrial de la localidad de Chiva se estuviesen utilizando como laboratorio clandestino de marihuana.

Estas naves industriales se ubicaban en zonas poco transitadas por personas y vehículos, con un pequeño número de empresas y situada en un «lugar tranquilo» para pasar desapercibido a terceros.

Los detenidos permanecían continuamente con las ventanas y puertas cerradas, las luces apagadas, se desplazaban por el interior de la nave con varias velas encendidas y sin hacer ruido que pudiera delatar su presencia desde el exterior, para evitar ser descubiertos.

ROLES EN LA ORGANIZACIÓN

Los miembros de la organización estaban altamente especializados, cada uno tenía un rol definido y se dividían en conseguidores, montadores, cultivadores y cuidadores.

Los conseguidores se dedicaban a localizar por toda la geografía inmuebles en alquiler que reunieran las condiciones adecuadas para el fin que buscaba la organización, en particular naves en polígonos industriales con poca actividad; mientras que los montadores estaban especializados en el montaje de la instalación necesaria para el acondicionamiento de las plantaciones en «pocos días» y evitar así llamar la atención en exceso.

Los cultivadores, por su parte, se encargaban de la manipulación de las semillas, macetas y de la tierra necesaria para las plantas de marihuana, además de supervisar frecuentemente el estado de la plantación; y los cuidadores tenían conocimientos avanzados en el cultivo y la manipulación genética del cannabis con el fin de que no desprendieran su «fuerte olor» característico. Eran los responsables en cada plantación de custodiar y evitar robos así como de cuidar las plantas hasta que alcanzaban el estado óptimo para su recolección y secado.

El líder de la organización, que controlaba la producción de las plantaciones y coordinaba las funciones de cada miembro de la banda, también ha sido detenido.

80.000 EUROS DEFRAUDADOS

Los miembros de la organización presuntamente estaban defraudando el fluido eléctrico, ya que habían manipulado los sistemas eléctricos para no tener que hacer frente al alto coste de las facturas, por lo que la corriente eléctrica era suministrada a las propiedades de forma ilícita, realizando los enganches mediante manipulaciones de anulación de los contadores. El importe defraudado podría ascender a los 80.000 euros.

El entramado eléctrico instalado para el crecimiento de las plantas estaba conectado con la línea de distribución y preparado para que funcionara la mitad de la instalación cada 12 horas.

Una de las naves industriales registradas contaba con «un sofisticado circuito ilegal eléctrico», así como con una red de extractores, aire y filtros de carbono «para eliminar los olores de la plantación». Además, contaban con sistemas novedosos para evitar olores consistentes en la realización de sofisticadas obras con creación de ventanas y puertas selladas con poliuretano.

En caso de haberse puesto en funcionamiento a la vez, toda la instalación podría haber dañado parte de la línea de distribución, afectando a parte de la población de Chiva.

Asimismo, supuestamente realizaron un enganche ilegal a la red de agua, que necesita este tipo de cultivos, practicando una excavación en el interior de la nave industrial. Estos invernaderos usan métodos hidropónicos, sistemas para acelerar los cultivos con disoluciones minerales en vez de suelo agrícola, de manera que a lo largo del año ofrezcan hasta cuatro cosechas diferentes.

Click para comentar
Salir de la versión móvil