València, 25 abr (EFE).- El president de la Generalitat, Ximo Puig, y el presidente de la Diputación de Valencia, Toni Gaspar, han firmado este martes un acuerdo por el cual la corporación provincial cede al gobierno valenciano la titularidad del Palau de la Generalitat, que es su sede desde 1983.
La Diputación cede al Consell la propiedad del Palau de la Generalitat
Así lo han escenificado ambos dirigentes con la firma del acuerdo por el que el edificio, que data del siglo XV y que, en sus orígenes y hasta 1983, acogió la sede de la Diputación de Valencia, que ha mantenido hasta hoy la propiedad del palacio.
El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha recordado que la cesión coincide con el 25 de abril, aniversario de la Batalla de Almansa, y ha explicado que algunos de los salones centrales del Palau «se plantearon en la época foral para reunir Les Corts y nunca se pudieron reunir por el Decreto de nueva planta».
«Muertos, heridos, prisioneros… El 25 de abril es inevitable recordar aquellos tambores de guerra, el peor desastre de la sociedad, el desastre moral», ha considerado Puig, que ha aludido a «las instituciones forales perdidas, la lengua perdida, la muerte, pensaron algunos», del pueblo valenciano.
El jefe del Consell ha apostado por «recordar» esa efeméride pero «no con desesperanza sino para valorar todo lo que ha constado conseguir la democracia, el autogobierno».
Pug ha dicho acoger con «alegría» la propiedad del edificio, que ha considerado «un acto justicia para el patrimonio del conjunto de valencianos».
100 años desde que la Diputación se hizo propietaria del Palau
«Este año hará 100 años desde que la Diputación se hizo propietaria del Palau y la cesión de las llaves resitúa en la normalidad lo que es un símbolo de lealtad y cooperación», ha considerado.
Por último, ha reivindicado una «gobernanza basada en el respeto a la diversidad, sin sectarismos, sin dogmas, que es la base del hecho diferencial valenciano» y ha añadido que es «hora de mantener y cuidar la convivencia».
Por su parte, el presidente de la Diputación, Toni Gaspar, ha considerado que este es un «final feliz y necesario» para el Palau porque permite «acabar el eterno proceso administrativo de hace 40 años».
Gaspar pide más colaboración
«Necesitamos más colaboración y necesitamos menos egoísmo», ha subrayado Gaspar, que ha instado a los representantes políticos a tener una actitud «responsable, de altura de miras, de conciencia histórica».
En un momento, ha dicho, en el que «el 10 % de los conflictos son fruto de una diferencia de opiniones y el 90 % de un tono de voz equivocado», ha llamado a recordar que «la banalidad, la dramatización y la mediocridad nunca han sido buenas aliadas del pueblo valenciano».