Durmiendo a la luna de València

Caminando por el Mercado de Abastos, a cualquier hora del día, colchones, sacos de dormir, mochilas, bebida y carros abandonados conviven a pocos metros de la comisaría de la Policía Nacional, con un Instituto de Secundaria y el polideportivo. Allí malviven varias personas sin recursos que pasan sus días y sus noches en la calle.

Muchos vecinos comentan que entre Jesuitas y el Botánico, en el jardín de las Hespérides, otro campamento crece casi a diario. Bajo el Puente de Campanar varias personas viven allí; colchones y alguna tienda de campaña son su refugio y lugar de descanso. Cruzando por encima es normal ver como se preparan algo para comer a escasos metros de una zona infantil de juegos.

Foto: Hugo Román

Lo que antes se veía localizado en zonas más céntricas de la ciudad o tramos del río ahora se extiende por toda la ciudad: Ruzafa, San Vicente, Marchalenes, en calles próximas a Blasco Ibáñez, Avenida de Aragón, Guillem de Castro. La lista de personas sin hogar es extensa, muy extensa por desgracia, y sus perfiles muy variados.

Algunos vecinos comentan que desde que las entidades bancarias cerraron sus sucursales por la noche estas personas se han visto obligadas a buscarse otros lugares. Ahora la visibilidad es mayor, así como el número de casos. Este problema social no es nuevo, lo que pasa es que antes era menos visible, azotaba las calles de manera «silenciosa» en la oscuridad de la noche, a nuestras espaldas. Y ahora se percibe sin tapujos a cualquier hora del día gritándonos en busca de una solución. En cualquier calle, de cualquier barrio, personas sin recursos acampan con las pocas pertenencias que tienen ante la mirada de transeúntes.

Foto: Hugo Román

Desde Servicios Sociales se explica que a raíz de la pandemia del coronavirus la realidad de las personas sin hogar se ha visibilizado como no se había hecho antes. Las cifras cuentan que en València, durante los meses de confinamiento, fueron atendidas 2.184 personas sin techo, con un balance de cero contagios.

El Ayuntamiento de València anunció hace unas semanas que tiene previsto la construcción de un ‘centro multiusos’ en la calle Salabert de Patraix para personas sin techo que contará con apartamentos dobles y sencillos, consignas, duchas para personas que no se encuentren alojadas, lavandería entre otras dependencias y servicios. Su emplazamiento será la parcela ubicada junto al Centro Municipal de Servicios Sociales de dicho barrio. Junto a este proyecto también se levantarán 25 apartamentos en la calle Ángeles del Cabanyal para estancias temporales de familias y personas que se han quedado también sin hogar.

Pero para que estas soluciones comiencen a ver la luz habrá que esperar a 2023 fecha prevista para iniciar las obras. Y mientras, en cada rincón de la ciudad es cada vez más normal, por desgracia, contemplar como este problema social va creciendo.

Y cada vez son más los que duermen en la calle, a la luna de València.