MADRID, 29 Nov. – La demanda de cirugías de mentón o mentoplastias ha aumentado un 17 por ciento en los dos últimos años, sobre todo entre las mujeres, según datos de la Sociedad Española de Cirugía Oral y Maxilofacial de Cabeza y Cuello (SECOM CyC).
Esta intervención quirúrgica, que consiste en un aumento de la barbilla, es más solicitada por las mujeres que por los hombres, según ha apuntado esta sociedad. «Se trata de un aumento del mentón al realizar una osteotomía (corte) por deslizamiento. Es un complemento de la cirugía ortognática, para deformidades dento-craneo-maxilofaciales, en la mayoría de las ocasiones», ha indicado el presidente de la SECOM CyC, el doctor Florencio Monje.
La mentoplastia es una intervención sencilla con la que se logra una mayor armonía de los rasgos faciales. «Las mujeres suelen optar por una definición más suave, para feminizar el rostro, mientras que los hombres lo marcan más: un mentón cuadrado se asocia con poder», ha comentado el doctor Monje.
Desde la SECOM CYC apuntan a varios factores para el aumento de estas cirugías. «La tendencia al alza se debe a diferentes causas como el auge de los selfies o la llegada de la menopausia», ha añadido el cirujano maxilofacial. Para afirmarlo, se ha apoyado en el último informe de la Academia Americana de Cirugía Plástica Facial y Reconstructiva, que indica que la principal motivación de la generación ‘millennial’ ante una cirugía estética es salir mejor en los ‘selfies’ y la insatisfacción con su imagen de perfil, por lo que se operan el mentón, la nariz o el cuello.
Otro de los momentos en los que se opta por la mentoplastia es la menopausia ya que debido a la falta de estrógenos, las mujeres envejecen de forma diferente a los hombres. Como explica el cirujano, el cambio de forma facial relacionado con la edad fue similar en ambos sexos hasta alrededor de los 50 años, momento en el que la trayectoria de envejecimiento de la mujer cambia bruscamente. «En las mujeres posmenopáusicas se atribuye el envejecimiento facial a la reabsorción ósea de la mandíbula», ha apuntado Monje.
EL SER HUMANO, LA ÚNICA ESPECIE CON MENTÓN
El mentón es una característica que solo se presenta en el ‘Homo sapiens’; un rasgo que no se encuentra en ningún otro homínido y que permite diferenciar de forma clara los fósiles de sapiens de los de neandertales. «El mentón es una autopomorfía (un carácter exclusivo de los miembros de una rama evolutiva). Es decir todos, los ‘homos’ antes del ‘sapiens’, por mucha mandíbula que tuvieran, no tenían proyección de la barbilla o del mentón», ha comentado el doctor Monje.
Las teorías sobre la aparición del mentón son varias. Según ha explicado el cirujano, los expertos no se ponen de acuerdo en los motivos por los que aparece el mentón por lo que confluyen diferentes hipótesis. Para la teoría genética ósea es un cambio evolutivo sin más. «También se estudia la posibilidad de que al ingerir una dieta cada vez más blanda, la masticación tiene menos función, los dientes se hacen más pequeños y tiene menos función el esqueleto mandibular aunque el mentón no ha variado de posición», ha precisado.
También se apunta a la posible relación del mentón con las vías respiratorias. «El mentón sería un elemento que en el homo sapiens favorece el tener una faringe pequeña pero que gracias a mantener el mentón todavía podemos respirar con cierta facilidad. El neandertal, sin embargo, tenía una mandíbula en general grande que cumplía esta función», ha indicado el presidente de SECOM CyC.
«Además, se podría relacionar el mentón con el empleo continuo de la lengua para hablar», ha añadido. Por último, el doctor Monje ha apuntado a la teoría de la atracción sexual. «En el varón en general parece que presenta un mentón más grande y más rectangular mientras que la mujer es más pequeño y más estrecho. El hombre puede estar atraído por un mentón de mujer que represente mayor fertilidad», ha finalizado.
Fuente: (EUROPA PRESS)