Si el sábado hablábamos de la visita de los Reyes Felipe y Letizia y Doña Sofía, la mañana del domingo las protagonistas eran la Princesa Leonor y la Infanta Sofía, que acudían al hospital a visitar a su abuelo.
Las pequeñas acudieron al hospital junto a sus padres, los Reyes Felipe y Letizia, y su abuela, la Reina Sofía. Leonor y Sofía estuvieron muy pendientes de su abuela en todo momento y entraron al hospital de su mano. Una nueva escena provocada por la Casa Real que evidencia otro intento desesperado por trasladar una imagen de cordialidad, que evidentemente no existe, incluso llegando a escenificar la imagen de la Reina Letizia abriendo la puerta del coche a la Reina emérita. Una instantánea que ha vuelto a dar la vuelta al mundo en todos los medios de comunicación.
Dos acciones no pensadas ni estudiadas que todavía han avivado más la crisis que se vive en el seno de la familia real española y que han levantado infinidad de críticas.
Es la primera aparición de las niñas desde la polémica del domingo de resurrección en la que fueron criticadas por el trato a su abuela y por la bronca pública de Letizia y Sofía.
Además de los Reyes y sus hijas, también ha acudido al hospital la Infanta Elena para pasar un rato con su padre, estuvo una hora y media aproximadamente con él y se marchó poco antes de que llegase su hermano, el Rey Felipe, con su familia.
Parece que el Rey emérito se está recuperando poco a poco y evoluciona de manera muy favorable como ha explicado la Infanta Elene: «Ya lo han subido a planta, está muy bien».