Fallas
Las propuestas de mejora del sistema de elección de Cortes de Honor
Publicado
hace 5 añosen
Con la elección de las Cortes de Honor ya realizada y a dos semanas de conocer el nombre de las máximas representantes de las fallas 2020, el proceso para llegar a este momento sigue generando dudas y debate. Un debate que en la Asamblea de Presidentes, en la que se elegía al jurado encargado de designar a las Cortes de Honor y Falleras Mayores de València, el propio Presidente de Junta Central Fallera (JCF), Pere Fuset, ya propiciaba e instaba a los Delegados de Sector a hacer extensiva a esta reflexión fallera «sin injerencias políticas».
Cabe recordar que este proceso se inicia con las preselecciones del último fin de semana de junio y finaliza con la llamada del Alcalde a mediados del mes de octubre. Tres meses y medio en los que para elegir entre las representantes de las 382 comisiones se pasa por las preselecciones de sectores del mes de julio en los que salen elegidas 73 niñas y 73 señoritas que en el mes de septiembre pasan dos semanas de pruebas con jurados encargados de elegir a 13 niñas y 13 jóvenes de entre quienes, posteriormente, y tras unas semanas más de pruebas con el mismo jurado, solo una niña y una señorita se convertirán, a mediados de octubre, en la nueva cara de la fiesta.
Sin duda unos meses llenos de ilusión e incertidumbre a partes iguales, con un coste económico y emocional importante que, por matemática pura, no acaba bien para todas dado que de 146 preseleccionadas solo 26 son elegidas. ¿Es necesario hacer pasar este proceso tan largo a las candidatas, en especial a las niñas? ¿De qué forma se puede mejorar u optimizar el formato? ¿Se deben introducir cambios? ¿Son necesarias tantas pruebas?
Desde Official Press hemos querido lanzar estas cuestiones a las voces encargadas de hacerlas extensivas al colectivo fallero: las fallas, representadas a través de la Interagrupación, así como los Delegados de Sector; además de otras voces de la fiesta como el propio Presidente de JCF y falleros de diverso sino político.
De introducirse cambios en el actual sistema de elección es un cometido que sólo los falleros y falleras pueden decidir y llevar a cabo. Y es por este motivo, que Guillermo Serrano, presidente de la InterAgrupación, destaca que es «un debate que deben dirigir los delegados de sector», quienes «contarán con todo nuestro apoyo para dar una vuela al asunto».
Según Serrano, el proceso de elección a Cortes de Honor y Falleras Mayores de València «es demasiado amplio» y este año «se ha alargado todavía más». Para agilizar la carga emocional que el sistema conlleva, el Presidente de la Interagrupación no descarta la posibilidad de «realizar un pase intermedio a mediados de septiembre en el que sólo pasaran 36 niñas y 36 mayores, y que fuera el mismo jurado para esta deliberación que para la final».
Guillermo Serrano es partidario de abrir este debate a las comisiones y que sean los falleros desde las bases quienes decidan. «Las fallas somos un ente cambiante que debe evolucionar, por lo que se pueden buscar nuevas fórmulas y métodos en pro de la fiesta y de las candidatas».
De manera muy similar se han pronunciado los Delegados de Sector. Ángel Santamaría, representante de las fallas del sector Pla del Reial Benimaclet destaca que es el propio Presidente de JCF quien propone trasladar esta reflexión a todos los sectores y de ahí a los presidentes de fallas. «Somos los transmisores del mensaje» que se deberá debatir en cada una de las comisiones, y si éstas deciden que sí, se recabarán las propuestas para ponerlas en común y trasladarlas al Pleno y a la «soberana Asamblea de Presidentes donde se votarían las ideas aportadas».
Sin que todavía no se haya concretado ninguna sobre el papel, realizar un «corte previo a la final tras las preselecciones o unas semifinales entre sectores» son ideas que ya se han escuchado en más de una ocasión (falta que lleguen a concretarse en propuesta) según avanza Santamaría, quien a su juicio considera que es un tema «complicado» porque todos los sectores quieren estar representados en la final de la Fonteta.
Fernando Molina, delegado del sector Poblats al Sud, y miembro del Grupo de Delegados que junto a Ángel Santamaría y otros tres delegados más, representan a todos los Delegados de Sector, se expresa en la misma línea argumental. «Tras el encargo de Pere, los sectores lo trasladamos a las fallas. De querer introducir cambios se deberá constituir una Mesa de Trabajo en la no sólo estemos los Delegados de Sector y ver qué ideas se trasladan para concretarse en propuestas. Pero esto es algo que no sabremos hasta el pleno de noviembre, como mínimo, si las comisiones quieren o no el cambio».
Molina coincide con Santamaría en que hay «sectores que sí o sí quieren llegar con candidata a la Fonteta», pero también aboga por realizar una «criba previa». «O bien que a la final lleguen la mitad de candidatas o sólo una candidata por sector». Son ideas que se han lanzado al respecto pero sin llegar a concretar más a la espera de conocer la voluntad de los falleros de base.
Asimismo, Fernando Molina también fue miembro del jurado de elección de la Corte de Honor y Fallera Mayor de València 2019, y aunque admite que es un «proceso largo» defiende la duración de las pruebas. «Al tener que entrevistar a todas las candidatas (y a sus familias en ese año) en horas fuera de trabajo hace que ahí ya emplees cuatro o cinco días de las dos semanas previstas para las pruebas con las 73 candidatas».
En cambio, para el nombramiento de la Fallera Mayor de València, Molina asegura que se podría adelantar y hacerlo una semana o diez días después de Fonteta. «A excepción de los dos días que las elegidas deben estar con los medios de comunicación, hay días para realizar nuevas pruebas de cara a esa elección final de la máxima representante sin tener que aplazarlo a mediados de octubre».
Pere Fuset, Presidente de JCF, y uno de los promotores de esta reflexión fallera, aclara «que son los falleros quienes tienen la potestad de introducir y aplicar cambios a este respecto a través de la Asamblea de Presidentes». Y es por ello que reclama que sea un «debate propiamente fallero sin interferencias ni protagonismos políticos».
En 2017, Fuset ya fue propulsor de establecer un jurado único para elegir a la Corte y Fallera Mayor de València, y tras conversar cada año con los jurados, éstos siempre coinciden en un mismo apunte: «Son muchas candidatas y en dos semanas no hay apenas tiempo para profundizar en todas ellas» (en referencia a las 73 preseleccionadas infantiles y 73 mayores).
Se trata de una «gestión complicada porque se juzga en base a unos criterios subjetivos, teniendo muy presente que no se trata de evaluar por foto ni por cuestiones estéticas».
Como un fallero más, Fuset se mostraría partidario de «establecer una fase intermedia entre las preselecciones y la final de Fonteta. La fórmula de cómo debería ser dicha criba lo dejo en manos de los falleros».
Otra de las propuestas que el Presidente de JCF vería con buenos ojos es el «plantear ampliar las opciones de personas que pueden formar parte de los jurados». Actualmente, el jurado sólo puede estar formado por presidentes de Falla y/o Agrupación, Delegados de Sector, Cortes de Honor y Falleras Mayores de València, a excepción de un miembro solo de entre los tres que propone JCF. Eso sí, todos ellos, sí deben estar censados como falleros en València. Actualmente, con estos criterios y según Fuset, «las posibilidades para ser jurado son muy reducidas para un colectivo formado por más de 100.000 personas».
En este sentido, y con el fin de «evitar sospechas o presiones», Pere Fuset plantea la posibilidad de «introducir el factor de azar dentro del proceso de elección del jurado» y a su vez abrirlo a gente que sea fallera pero que no esté censada en Valencia sino en otras poblaciones, e incluso abrir la posibilidad a que falleras y falleros de base puedan formar parte de ese jurado.
Por su parte, Amparo Picó, fallera y concejal del grupo municipal de Ciudadanos considera «elevada» la cifra de 73 niñas y 73 señoritas a las que el jurado debe evaluar en poco más de dos semanas para elegir sólo a 13. Coincide con otras voces de la fiesta en proponer «para mediados de septiembre» una «criba intermedia para que sólo pasen a la final de Fonteta 33 candidatas mayores y otras tanto infantiles». Otras de las ideas sería que en las preselecciones de julio «se eligieran ya menos candidatas por sector».
A su juicio, «no es necesaria tanta prueba, sino que la clave está en elegir un buen jurado que valore aspectos como la valencianía, el saber estar, la actitud, la educación, el amor por la fiesta y la vocación de servicio, pues las representantes de las fallas están a disposición de la fiesta y de los falleros». Es por ello que la concejal de Cs también abogaría por un cambio o mejora en el sistema de elección de jurados. «Es un tema decisivo e important».
Con todo ello, Picó recalca que «son los falleros quienes deben decidir el proceso que consideran que es mejor para poner en valor de forma positiva todo esto. Ellos tienen la última palabra».
El fallero Santiago Ballester y concejal del grupo municipal popular, también es de la opinión de que el sistema de elección «es demasiado largo». «Se debería de acortar el proceso y buscar entre todos los falleros la fórmula más idónea», aspecto que el edil del PP vaticina como algo «muy complicado». «El propio calendario ya juega en contra porque tras las preselecciones todavía se está disfrutando de la Feria de Julio, luego llega agosto con las vacaciones y el retomar en septiembre es cuando se inician las pruebas con los jurados», recalca.
Abierto a cualquiera de las ideas que ya se han podido escuchar entre el colectivo fallero (aunque sin que ninguna se haya concreado), Ballester señala que de forma «más rápida» se puede acortar el plazo de elección de la Fallera Mayor de València, dado que es el mismo jurado que previamente ya ha elegido a las 13 entre las que está la máxima representante de la fiesta. «Tras la elección de Fonteta, con una semana o diez días más para esa deliberación final podría ser suficiente», señala. Acortar las semanas de pruebas del jurado con las preseleccionadas o realizar una criba para que no pasen tantas candidatas a la final serían otras opciones bien valoradas por el concejal popular.
Aunque ve con buenos ojos la realización de pruebas de toda índole para elegir a las candidatas que cada jurado considera idóneas, Ballester apunta que «simplificaría el método». «Aunque hay que dar libertad a cada jurado para que valoren en base a sus criterios, es cierto que no es necesario para ello el que por ejemplo se tengan que vestir varias veces de valencianas con el coste que ello conlleva».
En relación al jurado, el fallero de Convento Jerusalén apunta que la propia complejidad y el tiempo que requiere el sistema de elección, hace que no sea tarea fácil encontrar falleras y falleros con disponibilidad para poder ser jurados, dado que desde que son nombrados hasta que eligen a la Fallera Mayor de València están cerca de mes y medio dedicados por entero a ello, no sólo con las candidatas sino horas después deliberando entre ellos.
Por todo ello, Santiago Ballester afirma que «sí o sí hay que buscar y encontrar la fórmula, y aunque no es sencillo, entre todas las falleras y falleros se llegará a una solución factible».
Official Press lanza también estas cuestiones al colectivo fallero a través de una encuesta no vinculante para conocer el sentir de las falleras y falleros. ¿Estás a favor de que se introduzcan cambios en el sistema de Elección de Cortes de Honor?