Castelló, 22 jun (OFFICIAL PRESS – EFE). Marie Claire previsiblemente el próximo 30 de junio presentará el concurso de acreedores. Después de cerrar sin acuerdo el periodo de consultas del ERE. Llevando a la firma de pantys y lencería íntima de Vilafranca del Cid (Castellón) a su liquidación.
Marie Claire presentará concurso de acreedores el 30 de junio y se liquidará
La última reunión para negociar el ERE de la plantilla tuvo lugar este miércoles y en ella se transmitió por parte de la dirección el estancamiento sobre el plan de viabilidad de la empresa. Este ha iniciado un proceso de reestructuración financiera y operativa para encontrar una salida a la deuda que acumula desde hace más de cinco años. Así de esta manera, explorar la búsqueda de un inversor.
Durante la negociación, se ha estado tratando la posibilidad de continuar la actividad con 89 personas y aplicar un ERE de extinción para 191 trabajadores. Una vía que por el momento ha quedado cerrada al no haberse producido avances en la reestructuración de la firma.
Fuentes sindicales afirman a EFE que están a la espera de que la dirección les vuelva a convocar pero no existe confianza en que haya avances. Por eso, el próximo 30 de junio la empresa ratificará el concurso de acreedores ante los juzgados de Castellón.
Los sindicatos están dispuestos a sentarse a negociar «las veces que haga falta» para salvar una empresa centenaria. Fundada en 1907 en Vilafranca del Cid, en la despoblada comarca castellonense de Els Ports, indican fuentes de UGT.
Solo un comunicado
El pasado 30 de mayo, la dirección de Marie Claire emitió un comunicado -el único pronunciamiento público que ha realizado durante todo el proceso- . La empresa explicaba que está llevando a cabo negociaciones con sus principales acreedores y realizando una búsqueda activa de inversores interesados en respaldar el proyecto de relanzamiento de la marca.
La empresa lleva enfrentándose a dificultades financieras durante los últimos años. Aunque «no ha conseguido superar pese al esfuerzo de la última dirección en la reducción y optimización de costes que ha llevado a cabo», decía en ese comunicado.
La financiación concedida por el Instituto Valenciano de Finanzas para hacer frente a la situación financiera y solventar las deudas acumuladas se destinaron al pago de las deudas pendientes con trabajadores y proveedores. Además, se destinó para reestructurar la empresa y adaptarse a la situación del mercado.
En los últimos años se ha visto afectada por factores externos, entre ellos la reducción del consumo de pantys, la crisis logística y de materias primas y el aumento de los costes energéticos. Esto mismo les llevaron a unos gastos productivos «casi insostenibles». En consecuencia a ajustar los horarios de fabricación y reducir la jornada laboral a cuatro días.
Actualmente 130 trabajadores se encuentran en un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE).