(EFE).- La búsqueda del cuerpo de Marta Calvo, la joven valenciana supuestamente asesinada por un hombre al que se le atribuyen al menos otras dos muertes violentas y otros cinco intentos, se prolonga ya durante 22 meses en los que se han sucedido diversos operativos multitudinarios, todos ellos infructuosos hasta el momento, envueltos en la intensa angustia que sufre la familia.
Desde su desaparición en una vivienda de la localidad valenciana de Manuel, donde se citó con Jorge Ignacio P.J., su supuesto asesino, el grupo de especialistas de la Guardia Civil ha barajado diversas hipótesis, para cuya comprobación se han empleado ingentes cantidades de medios materiales y humanos.
El detenido, que se entregó el 4 de diciembre en el cuartel de la Guardia Civil de Carcaixent, sostiene que la muerte de la joven fue «un accidente» tras haber mantenido una relación sexual con consumo de cocaína, y que procedió a desmembrar el cuerpo, cuyas partes distribuyó en varios contenedores.
Pero tras ocho meses de búsqueda y miles de toneladas de basura revisadas, la Guardia Civil -y el personal contratado para ello- no halló ningún resto humano en el vertedero de Dos Aguas ni tampoco evidencia alguna de la macabra confesión del sospechoso.
En las últimas semanas, el análisis minucioso de los diversos teléfonos móviles del acusado ha permitido acotar zonas concretas del termino municipal de Manuel y otros limítrofes, donde al parecer estuvo el acusado sin que se refiriese a ello en sus declaraciones, y por ello se ha desplegado desde el miércoles un nuevo operativo multitudinario.
En concreto, se ha formado un grupo de unas 40 personas entre los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO), la Unidad de Seguridad Ciudadana de Comandancia (USECIC), el Grupo de Rescate Especial de Intervención en Montaña (GREIM) y el grupo de Homicidios, así como brigadas forestales y la unidad canina.
En los primeros días de trabajo de este operativo se ha procedido al desbroce de una amplia zona de vegetación y a la retirada de sedimentos, con la complicación añadida de las consecuencias de las últimas lluvias que han afectado a la mayor parte de la Comunidad Valenciana, según ha explicado a Efe personal conocedor del operativo.
La búsqueda se retomará el lunes, han confirmado fuentes de la Guardia Civil.
Según ha señalado a EFE el portavoz de la familia materna, Mariano Navarro, el hecho de que se haya reactivado la «búsqueda física, porque la investigación es indudable que nunca se ha abandonado», está suponiendo, «como resulta lógico», una «gran tensión para la madre», quien «lleva dos años ya sin su hija».
«Lo vive con angustia, desconcierto y dudas, al tiempo que sentimientos encontrados de esperanza y a la vez conciencia de que, si la encuentran, toda esa esperanza se acaba», ha indicado Navarro.
El autor confeso de la desaparición de Marta Calvo es también el principal sospechoso del asesinato de otras dos jóvenes y del ataque a otras cinco, y tanto la Fiscalía como las acusaciones han reclamado que Jorge Ignacio P.J. sea procesado por asesinato, agresión sexual, omisión del deber de socorro y delito contra la integridad moral de las víctimas.
El detenido, de origen colombiano, está investigado por el fallecimiento de Marta Calvo y otras dos mujeres (Arlene y Lady Marcela, ambas en la ciudad de València), además de otros cinco homicidios en grado de tentativa.
Su entrega y posterior detención, el 4 de diciembre de 2019 en el cuartel de Carcaixent (Valencia), se produjo 28 días después de que se perdiese la pista a Marta Calvo, una joven de 25 años de Estivella (Valencia) que se citó con el sospechoso a través de internet.