La séptima edición de Masterchef ha pasado por tierras valencianas para decidir una de sus semifinales. Un conocido restaurante del centro de València era el lugar escogido para que Aleix, Carlos, Aitana, Valentín y Teresa pudieran salvarse en la semifinal y llegar a la tan deseada final del concurso.
Para ello, tenían unos comensales muy especiales: 30 falleros, todos ellos ataviados con el traje regional, a los que supuestamente se les serviría un menú «tradicional».
La sorpresa para los espectadores, especialmente valencianos, llegaba cuando el menú propuesto no era de la ‘terreta’ sino catalán y estaba compuesto por un primer plato de bacalao con piel frita y ‘samfaina’. De segundo, propusieron canelones de ‘rostit’ y culminaba el postre conocido como crema catalana.
Un menú que indignaba al público, que utilizaron las redes sociales para mostrar su sorpresa e indignación con el programa. Algunos incluso proponían que el menú podría haber sido más adaptado a la ciudad en que se celebraba la prueba «paella, esgarraet, buñuelo, fartons, all i pebre,…» otros atacaban la «poca sensibilidad» del programa:
Paella valenciana
Fideuá …
Esgarraet. …
Olla Valenciana. …
All i pebre. …
Aspencat. …
Buñuelos de calabaza…
Fartons…
Coca de Llanda….etc
Entre tantas delicias de COCINA VALENCIANA Pero vais y haceis 4 platos de la cocina catalana QUE HUEVAZOS TENÉIS!#MasterChefpic.twitter.com/oRXhbkI9iI
#masterchef Vergüenza os tenía que dar venir a Valencia y hacer un menú catalán,cada provincia a tenido sus comidas típicas y no habia nada en Valencia que cocinar que teníais que hacer un menú catalán?increíble para cagarse vergonzoso. ?????
Tiene delito que #MasterChef venga a #Valencia y que en lugar de un menú valenciano se cocine un «menú catalán» (sic) cuando en las pruebas de exterior casi siempre cocinan o reinvenciones de recetas típicas del lugar visitado o platos que ponen en valor los productos locales.