Dicen Maná y Shakira en la canción “ Mi verdad “ que hay mentiras en los labios, hay mentiras en la piel, hay mentiras compasivas, hay mentiras por piedad y hay mentiras que nos hieren de verdad. Yo añado que hay mentiras piadosas y mentiras con todo el siginficado de lo que es mentir, es decir, decir algo que no es verdad. También mentir es decir o manifestar algo contrario a lo que se sabe, cree o piensa. Y para mí, la peor clase de mentira es la que se dice cuando se es consciente que se miente para hacer daño a otra persona. Eso es de no ser buena gente, y digo gente y no persona.
A mí las personas que mienten no me gustan, creo que no son de fiar. Y para mentir hace falta tener mucha memoria y argumentos muy sólidos, es decir, crear una realidad sobre la base de una mentira, y esto, ya es tener mucha imaginación. A mí me gustan las cosas fáciles, simples y la verdad. Por eso, depende de quien venga la mentira o sea el mentiroso, las cosas me preocupan más, o menos. Y añado que las mentiras piadosas, son mentirijillas necesarias, evitan algún que otro sufrimiento y muchos dolores de cabeza.
El 12 de febrero fue el cumpleaños de Joaquín Sabina. Uno de mis artistas favoritos. Me gusta el Sabina poeta, cantante, capaz de describir lo más cruel de la manera más bonita. No es sutil ni elegante, pero en su manera de decir las cosas no hay dureza, por muy dura que sea la realidad que describe. Sabina ha sacado nuevo álbum y con “ Lo niego todo” su primer single a dúo con Leiva, maravilloso. Preciosa canción que me descoloca, Sabina no es como pensaba…o sí, es un genio.
Pues el día que cumplía años Sabina, puse una de sus frases en una de mis cuentas en las redes sociales. Me gusta la verdad. Esta era su cita;
A mí me gusta comer de verdad, beber de verdad, besar de verdad, charlar con los amigos de verdad, enamorarme de verdad, y cuándo pones tanto en todas esas cosas, lo más normal es que salgas lleno de cicatrices.