Las calles de Valencia ocultan miles de historias. Algunas de esas historias han quedado olvidadas para siempre bajo el peso de los siglos, de otras casi tan solo se puede escuchar el eco de su voz confundiéndose entre la leyenda y la realidad. Los nombres de algunos barrios o calles nos cuentan lo que sucedió en ellas mucho antes. Y a veces muchas de estas historias permanecen ocultas, esperando que alguien de con ellas para que puedan ser de nuevo contadas.
¿Por qué no recuperar esos espacios? ¿Por qué no buscar el equilibrio entre lo pasado y lo moderno? Precisamente eso es lo que desde hace ya unos años estamos viendo en algunos barrios de la capital del Turia como puede ser El Carmen o Russafa por citar algunos ejemplos: viejos locales que años o siglos atrás acogían entre sus paredes lugares de todo tipo: desde corrales a viejos gimnasios pasando por carnicerías o colmados.
Ese tipo de reconversión es lo que convierte a Valencia en una ciudad mágica, con encanto y única.
Y uno de esas últimas transformaciones se ha producido en el número 3 de la calle Historiador Diago, junto a la Gran Vía Fernando el Católico. Allí el edificio PAC fue construido y diseñado en 1835 para la fabricación de hilos de oro y plata fina entre otras tradiciones artesanas. Hace apenas unos meses sus cuarenta y cinco máquinas de la época paraban por primera y última vez.
Ahora ese lugar cobra de nuevo vida, renaciendo pero sin olvidar su pasado. Parte del espíritu de esa antigua fábrica queda aún latente al contemplar en su interior como todos los sistemas de poleas originales de la fábrica se han mantenido.
Porque los responsables de Playground Art Center querían reconstruir esas instalaciones para darle un nuevo uso pero manteniendo elementos que recordaran a los vecinos y alumnos cuál había sido su función en otra vida. Los propietarios dePlayground Art Center(dos holandesas y un norteamericano) tenían un objetivo ante todo: crear un lugar de encuentro en el barrio, un lugar abierto en el que poder disfrutar del arte en todos sus ámbitos. Un lugar en el que exponer, bailar, crear, charlar, reunirse y aprender inglés de la manera más natural. Un espacio que también acoja eventos sobre cine, teatro, literatura, música, artesanía y manualidades a los que poder acudir solo, con amigos o en familia.
Y eso es Playground Art Center, un espacio de arte en el que cada una de las distintas disciplinas artísticas se dan en inglés, en un entorno moderno pero que mantiene el encanto de aquella fábrica que ya trabajaba para el arte siglos atrás.
Siglos de historia de esa vieja fábrica conviven con lo moderno y toda esa historia sepultada por el polvo y que permanecía escondida en cajones (bobinas, billetes de principios del siglo XX, grifería) ahora se pueden contemplar en todo su esplendor en el remodelado espacio.
Porque los tiempos cambian del mismo modo que cambian los métodos para asimilar un idioma. Si los cafés y pubs de intercambio de idioma han supuesto una nueva y práctica manera de aprender, Playground Art Center va más allá: aprender inglés mientras los alumnos desarrollan su creatividad y aplican su talento artístico.
En resumen,una inmersión en el idioma inglés mientras los estudiantes de todas las edades adquieren o desarrollan sus habilidades.
Porque en este patio de recreo cultural y bilingüe hay cabida para la pintura, cursos de cómic, la danza moderna y coro, la escultura, escritura creativa, Lego Mindstorm, y un largo etcétera que no puedes dejar de descubrir.
Un recorrido por el camino de la creatividad en el que experimentar, explorar, aprender, divertirse todo ello de la mano de profesionales que nos harán ganar destreza creativa y lingüística. Porque el objetivo es aprender inglés pero también descubrir nuestros talentos individuales.
Playground Art Center es un centro de arte en el que se imparten cursos de una variedad de disciplinas en inglés para estudiantes de todas las edades pero también un centro comprometido con el medio ambiente. Y es que en sus entrañas guarda un secreto:en el sótano de las instalaciones han construido un laberinto geotérmico de más de 500 m3 para tener una climatización ecológica y renovable en cada una de las aulas.
Fusión de Historia, Arte, Cultura, Inglés, y pasión mucha pasión, por aquello que se hace. Eso es lo que se respira en este espacio que sin duda dará mucho que hablar… en inglés.